Capítulo 4: Nada de besos

–Nada de besos ¿Ok? –le pedí, por lo que asintió con la cabeza, tomándome de la mano con una sonrisa complacida, algo que me hacía creer que disfrutaba del plan.

Cuando salimos del salón comenzamos con nuestro plan, sus dedos se enredaron entre los míos y nos paseamos por el instituto tomados de la mano, muchos nos miraron sorprendidos, muchos se nos acercaron a preguntar si estábamos saliendo de verdad, aparentemente pensaban que sólo había sido cosa de copas, por ello el plan nos sirvió para acabar con aquellas sonrisas burlonas que antes nos dedicaban.

Ahora todos parecían tener una nueva imagen de nosotros y eso era bueno, claro que me daba vergüenza estar tomado de su mano cada vez que salíamos del salón.

Nosotros pasamos todo el día juntos recibiendo las miradas de todos, sus amigos me miraron como si yo fuera el culpable de que Nathan los evitara todo el día, de hecho, yo le dije que fuera con ellos para evitarme aquellas molestas miradas, pero Nathan no quiso salir y estar con ellos, dijo que sólo era para fumar por ello podía esperar.

No es como si hubiéramos hablado en todo momento, de hecho, casi ni lo hicimos, aunque si mostrábamos una imagen de pareja empalagosa, ya que cuando la profesora de literatura no llegaba.

Nathan se recostó en el asiento apoyando su cabeza en mi abdomen tras yo estar un poco inclinado hacia atrás en la silla, incluso me tomó de los brazos y me obligó a usar mi móvil mientras él me miraba.

Él mencionó que era para aparentar que nos estábamos tomando fotografías, añadiendo también que las parejas solían hacerlo, por tanto, abrí la cámara y nos fui fotografiando.

Nos tomamos varias fotos, al principio era por obligación, pero luego comenzamos a utilizar filtros de Snapchat, por ende, comenzamos a reír llamando la atención de varios compañeros de nuestro salón.

Ahora mi galería está repleta de fotografías de nosotros, había algunas muy graciosas. Iba a tomar la última, pero varios mensajes comenzaron a llegarme, era la estúpida de mi amiga, no lo digo por cariño, ni siquiera es mi amiga, pero esta se apegó a mí y terminamos recibiendo ese título, sin embargo, no es alguien a quien yo quiera como tal, o por lo menos ya no.

—¿De verdad estás saliendo con el macarra de Nathan?

—Creí que se odiaban a muerte.

—Deberías terminar con él, daña tu imagen y de paso la mía.

—Ya sabes que nosotros no nos involucramos con ellos, ahora todos piensan que yo soy amiga de esos vándalos ¡Qué asco!

Nathan levantó una ceja, demostrando extrañez, él podía ver perfectamente los mensajes al mismo tiempo que yo, por ello sonreí tras ver como quería alejarse de mí.

Claro que, antes de que lo hiciera, envolví con mi brazo izquierdo su cuello, aproximándome a su mejilla donde acerqué mis labios y nos apunté con la cámara.

Pude ver como mis acciones le divertían, sobre todo cuando tomé la foto para enviársela a mí tan estúpida "amiga" seguido de un par de palabras para que se diera cuenta de lo que pasaba entre Nathan y yo, aunque no fueran ciertas.

—¡Pero si es tan lindo!

—¿No salemos bien en esta foto?

—Hacemos una bonita pareja ♥

—Será mejor que nos separemos, si daño tu imagen no deberíamos ser amigos.

Pude ver cómo Nathan mordía su labio inferior y sonreía, él me defendió antes, ahora era mi turno, aunque el momento no duró mucho tiempo, ya que el pesado de Jaxon entró al salón, Jaxon es el casi novio de la estúpida que se apega a mí para ganar popularidad, es decir, de "mi amiga" ambos son igual de pesados, sin embargo, Jaxon Foster la supera por mucho, es engreído, tiene el ego aumentado al infinito, es un sujeto odiado por todo el mundo.

Este siempre intenta sacar a la luz su buen recurso de dinero, siempre habla sobre los viajes o autos que compra, también habla sobre la fortuna de su padre diciendo que todo el mundo es inferior a él, también dice que el instituto es mantenido por su padre, sin embargo, mi padre es el jefe del suyo, por ende, mi padre es quien da las mejores sumas de dinero para el instituto.

Por supuesto que esto es algo que jamás diré, no quiero que más gente se acerque a mí por interés.

–No puedo creer que sea cierto– dijo viéndonos con arrogancia, odio la forma en la que habla, es como si cada palabra saliera de su nariz, es difícil de explicar, pero deben saber que es simplemente molesta– debí suponer que eran tal para cual– carcajeó mientras aplaudía como foca– son ambos igual de vulgares, no pensé que mi querida Noelia hablara en serio cuando dijo que eran novios ¡Qué gracioso!

–¿Por qué no te pierdes? –le preguntó Nathan entrelazando sus dedos con los míos, manteniendo la cercanía de antes.

–Que bajo has caído Andrew– dijo riendo mientras se alejaba– ¡Que bajo! –gritó haciéndose escuchar, aunque varios de mis compañeros comenzaron a abuchearlo.

Le gritaron de todo, de hecho, lo humillaron de tal forma que Nathan y yo comenzamos a reírnos, nunca me había reído con mi enemigo, pero extrañamente la pasé bien estando con él, estuvimos todo el día juntos y nos fuimos en mi auto hasta mi casa, mi auto otra vez olía a su embriagador perfume, no sé cuál usa, sin embargo, me vuelve loco.