Capítulo 4. Descarga eléctrica

Por Alejandro

Ya no soportaba más a mi secretaria, no entiendo a las mujeres, creen que por acostarse conmigo algunas veces, me tengo que casar con ellas.

Estoy asqueado, son todas iguales.

No hay una sola que sea lo suficientemente madura para entender que a pesar de que me acueste con ellas, siguen siendo mis empleadas y que nunca van a pasar de ahí.

También está el hecho de que me canso rápido de las mujeres.

¿Por qué me iba a conformar con una sola, habiendo millones?

Se me tiran a los pies, entonces es ridículo que elija solo a una.

También tengo que aguantar a mi padre diciendo que tengo edad suficiente para casarme.

Dice que tengo que sentar cabeza.

Soy el mejor en los negocios.

Hasta mejor que él.

Ya sé que él creó el imperio y todo eso, pero yo lo mejoré y le hago ganar millones, varias decenas, por año.

Tengo 28 años, soy atractivo y multimillonario, tengo mujeres a patadas para elegir y él pretende que me case, está loco.

Con eso de que soy hijo único y que quiere tener nietos, me está volviendo loco y cuando está en el país no hacemos más que discutir sobre mi vida personal.

Creo que viene el mes siguiente y pensar en eso ya me pone de mal humor.

Para colmo de males, mi secretaria es una imbécil, me armó un escándalo porque llegué con una mujer a mi oficina.

Con mi secretaria me entretuve 2 semanas, para ella es más que suficiente.

Ya ni quiero verla.

Bajo del ascensor pensando que le voy a ver la cara y eso también me pone de mal humor.

Veo que hay una chica al lado de ella, bien por Susana que ya le consiguió reemplazo, es el reemplazo, eso sin duda, porque nadie más está autorizado para estar en este piso.

Es donde trabajo yo, nadie tiene derecho a molestarme.

Me acerco y se paran las dos.

Miro a la chica nueva y es preciosa.

Le recorrí el cuerpo con mi mirada.

Empecé por las piernas, me pierden las buenas piernas de las mujeres, ella tiene una pollera ajustada, por arriba de las rodillas, es delgada pero con muy buena forma, sus piernas me encantaron, buenas caderas, parece de cintura pequeña y tetas…normales, no puedo ver mucho, ya que sobre la camisa tiene un saco, femenino, pero le tapa demasiado, para mi gusto.

Muero por verle el culo, ya se lo miraré dentro de un rato.

Cuando le veo la cara, es realmente preciosa.

Rubia natural, aunque las platinadas me encantan, tiene ojos verdes, parecen de gata salvaje, aunque sus rasgos son muy finos y una boca, de labios perfectos, de esos que invitan al beso, a que se los muerdas.

Ya quiero tenerlos chupándomela.

Definitivamente es preciosa y no es que, como dice mi padre, que piensa que porque miro a una mujer y tengo sexo que ella, tengo un problema, lo que sucede es que soy muy activo sexualmente y me gusta mucho la variedad en las mujeres.

Aunque definitivamente tienen que tener buenas gambas y un culo y unas tetas decentes.

Ésta nueva, cumplía con todo, solo faltaba chequear el culo, pero por lo que vi hasta ahora, me bastaba.

Mi antigua secretaria parecía una pobrecita a su lado ¿Por qué me acosté con ella?

La nueva se puso colorada con mi mirada.

Me encanta el poder que tengo sobre las mujeres.

Le pregunto si es mi nueva secretaria y me contesta que sí, a la secretaria anterior ni la miré, no quería verla.

Le digo que venga a mi oficina, cuando entra le digo que cierre la puerta, es que quiero que gire para verle el culo.

Parecía perfecto, pero el saco no lo dejaba apreciar demasiado, las piernas, desde atrás, se le veían perfectas.

A esta me la cojo hoy, pensé.

Abrí su ficha, que Susana muy sabiamente me había mandado.

Mierda, era demasiado jovencita y suelen ser las que hacen más escándalos, aunque la secretaria que tengo ahora, es una loca de mierda y tiene casi mi edad.

Me quedé mudo cuando vi que prácticamente es licenciada en administración de empresas y domina 3 idiomas.

Le hice unas cuantas preguntas, le pregunté si tenía novio y cuando me dijo que no, me alegré, no quiero un tipo celoso rompiéndome los huevos, porque teniendo a esta belleza al lado, cualquiera se pondría celoso.

Me gustó que viviera con amigas.

Son más independientes las que viven con amigas que las que viven con sus padres.

Le pregunté si podía viajar, la voy a llevar a algún lado.

De todos modos, viajo seguido por negocios y necesito una secretaria competente, espero que ésta lo sea.

Le dije que la iba a necesitar sábados y domingos.

Volví con el tema de los idiomas y le pregunté en francés, si se quería acostar conmigo.

No se lo esperaba, se ruborizó.

Sin embargo me contestó en francés, que no, que solo venía a trabajar.

Le tomé una mano y su palma se la acaricié con mis dedos, fui yo el que sintió una descarga eléctrica, cuando tuve contacto con su piel.

Le dije que yo iba a ser su premio y le guiñé un ojo y cuando le ofrecí un bono especial, me pareció que se ofendió, oka, creo que me fui de mambo.

Pero ya siento un deseo por ella que no voy a contener por mucho tiempo.

Va a caer en mis brazos en algún momento.

Mientras tanto, a vivir la vida loca.

Le dije que iba a tener que entretener a mi padre y me miró casi espantada, tenía ganas de reírme.

Noté que en casi todas las frases incluye la palabra señor y no sé si lo hace para poner distancia o me goza diciéndolo.

Ya me va a llamar señor cuando la tenga debajo mío.

Por otro lado, me sirve dilatar un poco tenerla, porque de verdad necesito hacer algunos viajes cerrando negocios y ella parece preparada para ser una buena asistente, no como la idiota que tuve estos últimos días de secretaria, que dijo que sabía inglés y no tenía la menor idea de nada, creo que ni debe saber saludar en ese idioma.

Esta chica nueva...me fijé su nombre en la pantalla de mi computadora, Valeria, al contrario, dijo que con el francés solo se defendía y me contestó perfectamente, aunque tardó en contestar unos segundos, no obstante, al ponerse colorada enseguida, me di cuenta que entendió al instante lo que le había preguntado.

Se supone que los otros idiomas los hablaba mejor.

Ya lo voy a comprobar.

Es lo mejorcito que tuve como secretaria, tanto intelectualmente como con su presencia.

Llamo presencia a tener muy buenas piernas, buen culo y buenas tetas.

Espero que siga el ritmo en mi trabajo y también en mi cama.

Cuando se fue, la volví a mirar, definitivamente me encantan sus gambas y parece tener un buen culo.

Muy buena elección, mi querida Susana.

Lo único que me jode es que tenga 20 años, es jovencita.

Me quedé un buen rato pensando en ella.

Definitivamente me gustó mucho.

Volví mi atención a la pantalla.

Tenía que comunicarme con un socio comercial en Estados Unidos.

Le pedí, por el teléfono interno, a mi secretaria, que me comunique con Kevin White, ella sabe que tiene que hablar en inglés y siempre me pone una excusa.

Esta vez no lo hizo.

Al rato escucho que suena el teléfono interno y no era la voz de mi secretaria, pero reconozco la voz de la chica nueva, diciendo que tenía en linea al señor Kevin White.

Al menos logró comunicarse y me volví a preguntar que hice 15 o 20 días al lado de la idiota que hoy, por suerte, se va.

El personal trabaja hasta las 17 y 30 y entra a las 9 de la mañana, yo, muchas veces estoy más temprano, por lo cuál le aviso a mi secretaria de turno, que voy a estar más temprano, así ella también lo hace.

Borré el número de celular de la que se va hoy, estaba agendada como secretaria, con lo cual no tengo idea de como se llama.

La preciosura que conocí hoy se llama Valeria, ni sé porque recuerdo su nombre, no suelo recordar los nombres de mis secretarias, las cambio seguido.

Agendé su número como secretaria Valeria.

Mi secretaria se tenía que quedar hasta que yo me fuera.

Valeria cursaba en la facultad, no sé cómo iba a hacer con ese tema.

Susana me dijo que como mi nueva secretaria tenía facilidad para los idiomas, le dijo que le iba a pagar un curso de chino.

Vi lejano el momento de viajar a China, ni siquiera creo que esa chica vaya a estar como mi secretaria de acá a 6 meses, pero si era buena trabajando y me cansaba, aunque sea de verle la cara, podíamos pasarla a otro sector y nos serviría, depende del sector, que supiera hablar en chino.

Aunque su cara...era como tener un orgasmo, sí, todo es sexo para mí, más esta preciosa mujer... rubia, de cabello lacio, largo, por arriba de la cola, eso me fijé cuando salió de mi oficina, ojos verdes, atigrados, pestañas increíbles, eso me fijé en la foto de perfil, aunque pueden no ser naturales, no es que sepa sobre todos los temas, pero en la cadena de perfumerías que teníamos, importamos unos productos para eso, tampoco me importan mucho sus pestañas, su nariz es pequeña y su perfil me gustó y claro, la frutilla del postre que es su cara, termina con su boca, de labios carnosos y rojos, moría por besarlos y por meter mi pija dentro de ellos.