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-Siempre es un placer verlas chicas- dice guiñando un ojo y volteándose.
-Por fin en casa- suspiro colocando la bolsa con todas mis cosas en el suelo, lo observo y no podría estar más feliz de estar aquí. Este apartamento me cuesta una pequeña fortuna pero es justo como lo quería, un pequeño loft en Brooklyn, casi todo el espacio abierto, excepto el baño por supuesto y el dormitorio que está separado del resto de la casa por una puerta corredera. Está todo como lo dejé, por supuesto, no es como si se hubiera ido por años, pero no recordaba que se viera tan lindo y limpio. Tal vez Britt envió a sus limpiadores a arreglarlo, la idea de que alguien entrara aquí sin mi permiso me molesta un poco, pero sé que lo hizo sin malicia, espero. Antes de hacer nada más decido tomar una ducha, la necesito para lavarme todo, desde el olor a hospital que siento en mí hasta los pensamientos que no me han dejado desde el discurso de Grace anoche. Me desvisto y tiro todo a la lavadora, más tarde la pongo, no me gusta guardar la ropa sucia en el cesto de la ropa, entonces toda la casa huele mal. Estoy cansado, necesito dormir bien, por suerte tomé un taxi de regreso, la bicicleta está bastante rota y ahora se la han encargado, en los próximos días se la llevaré a un mecánico amigo de J. I. Métete en la ducha y enciende el chorro, lo quiero caliente. Lavo cada centímetro de piel, mi cabello dos veces, después de veinte minutos salgo de ese paraíso y me envuelvo una toalla alrededor de mi cintura, rápidamente paso mi cabello con otra toalla y salgo del baño seguido de una nube de vapor. Me tiro en la cama y cierro los ojos. Gracia. La veo. Siento que me acaricia, ¿por qué no la detuve? ¿Por qué? ¿Extrañé su toque? NO, ¿no fue para arruinar el plan y encontrarme despierto? SÍ. Tiene que ser así, ella murió por mí. Tal vez. Oh mierda, Carter, te estás convirtiendo en el cobarde que solías ser, saca tus jodidas bolas. Es verdad, mi conciencia está tranquila, pienso en todo el daño que me ha hecho y sus excusas que hasta hace un segundo le hubiera perdonado vuelven a ser nada a mis oídos. Me calmo al instante.
Escucho el timbre de la puerta, debe ser Jordi, le pregunté si podía ir a hacer la compra, todavía me duele un poco la pierna y no quería esforzarme. Me levanto de mi cama súper suave y cómoda y me pongo mis bóxers, pantalones de chándal grises y una camiseta blanca de manga corta, es finales de agosto y el sol empieza a calentar un poco menos. Como era de esperar es él, con dos bolsas llenas de cosas, lo dejo pasar y lo saludo con un rápido abrazo y una palmada en la espalda. J me sonríe y pone las bolsas en el mostrador de la cocina, sé que algo está pasando porque cuando sonríe así, un poco travieso, significa que definitivamente ha visto algunas chicas geniales y tal vez incluso está drogado. Pero joder, estaba en el supermercado, ¿mi amigo es tan multitarea? Antes de que pueda preguntarle, él me precede.
-Carter, Carter, Carter, me dijiste que Grace era genial pero ¿y? Dios amigo, es un bombazo, y esa Lucy también, ¿pero no se estaba burlando siempre de ella? Me parecieron amigas, oh bueno, estaba diciendo, dos bombas sexys en el supermercado. Miro a Jordan, tal como imaginé que veía a dos chicas, pero no dos chicas cualquiera y una de ellas es Grace. ¿Por qué siempre tiene que estar en medio de las bolas? Esto me irrita.
-Y sabes que cojones me importan, te contesto, nada- le contesto malhumorado a mi amigo
-Vamos C, no pensé que te molestara que la mencionara, y luego fuiste el primero en decirme que era genial, perdón por haber entendido mal - Me siento un poco culpable por contestarle así a J, después de todo no debería no me da molestia escuchar su nombre pero desde que la vi en el hospital y me "recordé" que existe y sigue viva aunque ya no existe para mi ha tenido cierto efecto en mi, aun tengo que darme cuenta de qué tipo sin embargo.
-No, lo siento hombre, es que algo pasó anoche, con ella y no puedo dejar de pensar en eso, entonces cuando lo logro llegas y la primera palabra que mencionas es su puto nombre, es como si me estuviera persiguiendo, no lo hice. No sé que fue en Nueva York, si lo hubiera sabido, ciertamente no me habría mudado aquí. Que puto nervios.-
-¿Quieres hablarme de eso? - pregunta J al verme bastante conmocionado
Y así lo hago, me desahogo, le cuento todo, sobre ella tratando de disculparse y actuando como una mierda porque es torpe pero luego se arma de valor y me confiesa todo, y luego comienza a acariciarme el cabello, ahí me encantó la respuesta de Jordan "¿Qué diablos?" Me eché a reír, ella tuvo la misma reacción que yo, al menos no soy el único loco, sigo hablando de que ella no quería hacer esta jodida apuesta porque yo le gustaba, que es diferente a lo que me dijo britt, pero mi novia nunca me mentiria verdad? Estaba destruido esa noche, ella nunca se habría aprovechado de eso, ¿verdad? Le preguntaré de todos modos. Y luego concluyo la historia con un beso en la frente.
Jordan está en shock -Mmmh lo de Brittany apesta de todos modos, siempre te he dicho que esa chica está en mi trasero, ¡¿sabes cómo la llamo, verdad?! Kitty, kittisíncula. Escucha a tu amiga experta en el amor- si si... -Nunca te he visto tan feliz como cuando estabas con Grace, con Britt si lo eres pero nada que ver con las sonrisas que le dabas a Grace, la amabas pero Can ¿Se puede decir lo mismo de Bretaña? -
-A que te refieres J- le pregunto a mi amigo quien me esta mirando esperando una respuesta que probablemente nunca llegue, pero no porque no quiera responder sino porque realmente no se la respuesta. No sé si amo a Britt, ciertamente la amo inmensamente por todo lo que ha hecho por mí, pero ¿se puede llamar amor? Después de todo, ni siquiera recuerdo cómo amar a una persona, ¿me comporté de manera diferente con Grace? Nunca me lo he preguntado, ya que no pensé ni una vez en ella hasta hace tres días.
-Quiero decir lo que dije hombre, piénsalo, de todos modos ahora tengo que irme, llámame si necesitas algo, ¿de acuerdo?-
-Vale gracias J-
Tan pronto como Jordan cierra la puerta principal, le envío un mensaje de texto a Britt.
"Espero que estés en casa porque necesito follarte"
Su respuesta me llega después de dos minutos.
"No puedo esperar para hacer que te corras;)"
Bien hecho, mi novia, pienso mientras me pongo los zapatos y salgo de la casa. Necesito desconectar y como el boxeo está prohibido por un tiempo si no quiero empeorar mi condición, lo que necesito es un buen polvo.
Enciendo un cigarrillo, inhalo y expulso el humo mientras estoy de pie junto a la ventana del dormitorio de Britt en calzoncillos. Realmente lo necesitaba, cuatro días de abstinencia son demasiados para mí, y ella sabe cómo satisfacer mis deseos más sucios. Si bien hoy es diferente, no quise satisfacer mi necesidad física sino más bien desconectar, por lo general también me enfoco en Britt, siempre hago que se corra, pero hoy no, no lo logré, la verdad es que no lo logré. Ni siquiera lo intentes. Solo pensaba en mí y en la necesidad de olvidar, con cada empujón la veía alejarse de mi mente y cuando llegué ya no existía. Como érase una vez. Entonces, ¿por qué no me siento tan ligero como una pluma? Miro el cigarro y me doy cuenta que está prácticamente terminado y solo le di una calada.
-Oye amor, ¿te pasa algo? Te veo raro, aun mientras lo hacíamos estabas raro, ¿te duele en alguna parte? - Mi corazón le aconseja a mi conciencia pero antes de que me atreva a decir esa gilipollez le respondo
-No, no te preocupes, solo estoy cansada, sabes que la cama del hospital no era nada cómoda- insinué una sonrisa para tratar de ser más creíble.
Recuerdo a Jordan dándome ese discurso sobre Britt y cómo cree que debería creerle a Grace sobre la apuesta. Mientras estoy en eso, le pregunto a Britt directamente
-Nena, te acuerdas de la noche de la fiesta, si esa fiesta... tu y Grace habian apostado por mi verdad?-
-Pues si, digamos que me salio enseguida como siempre te he dicho- responde ella un poco a la defensiva
-¿Y cómo funcionaban tus apuestas? ¿En el sentido de que había un piso debajo?- digo tratando de ser lo más indiferente posible. No quiero que se pregunte por qué estoy haciendo todas estas preguntas.
-Oh, sí, por supuesto, siempre tuvimos un plan bien pensado. Decidimos cada vez la fecha de inicio y finalización de la apuesta y anotamos todo en un cuaderno. No sé qué le pasó, probablemente hasta lo tiré- responde ella jugando con su cabello
-¿Oh sí? ¿Y qué días había elegido para mi apuesta? Bueno, supongo que la fecha de finalización era la fecha de la fiesta- le digo acostada de lado para mirarla
-Tenía que empezar en febrero, tu cumpleaños. Recuerdo que traje un muffin de chocolate porque sabía que era tu sabor favorito. Lo conseguí en Valentine's, mi panadería favorita. Pero luego, en un refrigerio, cuando tenía que venir y traerles un muffin para conocernos, decidí retirarme. Así que le di todo a Grace y ella vino a presentarse - Recuerdo perfectamente ese puto muffin y no era de chocolate. Era caramelo salado, mi sabor favorito, siempre me pregunté cómo sabía eso Grace, pero nunca se lo pregunté. De cualquier manera, realmente apestaba. Me dijo que lo había hecho con sus propias manos, pero se nota que le había echado más sal de la que realmente se fue. Así que como disculpa se había ofrecido a ofrecerme uno esa misma tarde. Era la primera vez que salíamos. ¿Por qué Brittany me habría dicho algo diferente? Me quedo con esta pregunta sin respuesta entonces decido irme así que me visto, me despido y salgo de ahí. Una vez que llego a casa me siento en el sofá y tomo la bolsita que compré en una pastelería de camino aquí, la abro y saco un muffin, lo huelo, caramelo salado. Muerdo un trozo, el primero después de aquella maldita tarde de junio en la que a partir de ese día mi muffin favorito se ha convertido en el de chocolate.
Han pasado dos semanas desde que hablé con Carter. Fue dado de alta el día que yo estaba de baja, por lo que cuando regresé al hospital su habitación ya estaba ocupada por otro paciente.
Las palabras de Jordan no me dejaron del todo indiferente. Dejó en claro que si solo golpeaba a uno de los dos, Carter lo mataría. Ahora, podemos excluir a Lucy: por supuesto, en algunos momentos fueron cercanos y él la ayudó, pero es con los suyos que estuvo cuatro meses. Magníficos meses, podría añadir. ¡Esta cosa me asusta! Apenas me habló, pero seguro que debe haberlo hecho con Jordan. Realmente no creo que se quedara hasta antes de esa fiesta. Él sabe con seguridad lo que pasó entre nosotros. Pero entonces, ¿por qué decir esas cosas?
Estos pensamientos han estado dando vueltas en mi cabeza durante mucho tiempo. Necesito un descanso. Entre cursos y el hospital siempre estoy fuera de casa y nunca pienso en mí.
-Hola Lucy, ¿estás ocupada esta noche? - le pregunto mientras salgo del baño. Últimamente, a menudo me encuentro pensando en mi vida mientras me ducho.