Historias
LA NOVIA DEL DRAGÓN
Isabel Allen sabía que no debía confiar en los hombres. Mucho menos en uno cuyo apellido trajo la desgracia a su hermana. Adolfo Mondragón era un hombre poderoso y deseado por las mujeres, no solo por su atractivo físico, sino por su fuerza seductora, la misma que podría hacerla perder la cabeza si se lo permitía. Y si algo ansiaba Adolfo, como nunca en su vida, era que Isabel dejara de comportarse como una virginal jovencita; pues él mejor que nadie la conocía bien. Años atrás la vió amenazar a su hermano con delatar su irresponsable paternidad ante la prensa sin importarle dañar la reputación de su madre: una famosa diseñadora de ropa. Luego lo estafó y desapareció. Adolfo y su familia querían la custodia de la niña que una vez fué rechazada por un mal entendido, el problema era que Isabel la tenía y simplemente se negaba a dársela, tanto o más como entregar su voluntad al hombre que intentaba seducirla con falsas promesas de amor. Adolfo la engañó una vez aprovechándose de su juventud, pero no volvería a caer... ¿O si? Después de todo, ¿quién podía resistirse a los encantos del terrible Dragón?
LA TENTACIÓN DE LUCY
LUCY COLLINS Es una monja ordenada, no es novicia, de 24 años con un carácter amable y sonriente, ingenua, inocente. Inquieta y parlanchina. Trabajó con enfermos hasta que debió salir para cuidar de su madre adicta.Hasta entonces conoció a su benefactor, el desconocido que cubrió sus gastos durante el noviciado, un "padrino" que jamás imaginó sería como él...o que la miraría como él. GUY RICHARDS Es un inglés de 36 años, empresario, soltero, callado, muy callado. Discreto en cuanto a sus encuentros íntimos. Conoce a Lucy desde que era una adolescente y jamás quiso acercarse por el extraño efecto que su presencia causa en él. Guy tiene un estricto decálogo acerca de cómo tratar a una mujer, pero con ella simplemente será muy difícil llevarlo a cabo. Para él, la seducción es algo que va más allá de las palabras y el sexo... ¿bastará una mirada, un roce, un suspiro, para que esa religiosa, protagonista de sus sueños más perturbadores, entre en su juego? La duda es si ella está dispuesta a caer en la tentación... en sus brazos.
MIRANDA BUSCA NOVIO
Roman Watson es el nuevo y molesto vecino de la famosa Miranda Cross. Se compró una propiedad y está decidido a remodelarla, aunque su vecina promete hacer su vida una pesadilla. Miranda parece tan dulce e inofensiva, lo cual contrasta con su carácter de Grinch y aunque tiene por vecino al que parece un stripper de un metro noventa y cien kilos, no se intimida, pero que deba compartir su jardín con él, es una afrenta que no va a dejar pasar. Ese hombrezuelo no la va a conquistar con esas estúpidas y eróticas cualidades que tiene, como ése cuerpo de Adonis, de Hércules, de macho reproductor con el que estaría dispuesta a sufrir una parálisis total con tal de que la llevara a la pared más cercana y le enseñara uno que otro movimiento de pelvis prohibida. Miranda juraba que haría lo que fuera para echarlo… lo que fuera.
¿QUÉ HARÍAS POR AMOR?
Cuando el famoso y seductor biólogo de televisión Ian Armstrong pudo conocer a Maggie Sosa a través de un concurso vía correo electrónico decidió que quería verla en persona para confirmar que la química erótica que se dió entre ellos era real al estar frente a frente. Lo que él no sabía era que la salvaje de su capataz fué con quien realmente chateó y cuando llegó al rancho de los Sosa se topó con una joven mal vestida y malhumorada con la que se vió obligado a convivir. Estando juntos, esa brutal mujer le empezó a complicar la existencia y no solo porque desde el primer día lo dejó a la intemperie, sino porque cuando estaban juntos lo único que deseaban era arrancarse la ropa y actuar como animales salvajes ansiosos de probar cada parte de sus cuerpos. Solo había un problema: Magui. ¿Cómo podría Carolina confesarle que estaba enamorada de su novio?