Capítulo 3
Y ni siquiera se molestó en conocerla.
Soy un puto graduado, incluso hablo tres idiomas.
Asistí y me gradué de la universidad con las mejores calificaciones.
Pendejo, bastardo.
¿Por unos tatuajes y dos piercings?
Regreso a casa casi media hora después.
Tiro la bolsa a un lado.
Y me tiro en el sofá.
Enciendo un cigarrillo y trato de calmarme.
Odio a la gente que juzga sólo por la portada.
Todo el mundo tiene derecho a hacer lo que quiera con su vida.
¿Quién dice que no puedo estar a la altura de ser niñera?
Ah el puto pendejo, ese es quién.
Una semana después, agoté casi todos mis ahorros, principalmente en facturas.
Todavía me queda algo de dinero, pero no sé si podré aguantar el mes que viene.
Tuve otras entrevistas, pero nadie volvió a llamar.
La pregunta más popular fue: ¿por qué todos esos tatuajes? ¡Eres una chica!
Suspiro, en medio de la histeria.
Creo que mi trabajo es ser camarera nocturna.
No me llevan a ninguna parte.
El teléfono suena.
- ¿LISTO?
- ¿HABLO CON MARY-ANNE WISKYES?
- SÍ, LO SOY. ¿QUIÉN ES ELLA?
- LLAMO EN NOMBRE DEL SEÑOR Golem. ÉL ESTÁ DISPUESTO A DARTE UNA ENTREVISTA.
- ¿ESTÁ DISPUESTO A DARME UNA ENTREVISTA? ¿EN REALIDAD? Bueno, dile que se vaya a la mierda...
- ¡DEJA DE SER TAN VULGAR YA POR DIOS! TE ESPERO EL LUNES A LAS OCHO DE LA MAÑANA. ME GUSTA LA PUNTUALIDAD.
Y el...
- YO NO VOY. ¿QUIZÁS NO TE ESTÁ CLARO?
- VAMOS, EMPEZAMOS CON EL PIE MALVADO, ME GUSTARÍA TENER LA OPORTUNIDAD DE DISCULPARME, POR MIS PALABRAS. TE ENTREVISTARÉ Y SI CREO QUE ESTÁS A MÍ, TE CONTRATARÉ.
Colgó.
El pendejo me colgó.
MARÍA
Llega el lunes, contra todas mis advertencias. Realmente necesito ese trabajo, o más bien sería más correcto decir que necesito un período laboral.
Estoy cansado de atender a clientes medio locos o depravados/pervertidos en Moonlight.
Aunque mi probable futuro jefe, lo recogí allí mismo. Lo cual es bastante extraño, en primer lugar porque nunca me recogen y, en segundo lugar, porque nunca, quiero decir, nunca, me he acostado con alguien un par de horas después de conocerlo.
Pero sí, de vez en cuando una excepción es buena, y tengo recuerdos memorables de esa noche.
Preparo mi infusión habitual, odio el café y su olor me da náuseas. Mucha gente me dice que soy raro, pero realmente me importa un comino. Me pongo mi ropa de jogging y salgo a correr. Siento la necesidad de liberar tensiones antes de enfrentarme al rey de los pendejos.
Corro sin parar, recorriendo kilómetro tras kilómetro. Desde hace unos años, correr es mi salida, la mejor forma, la más saludable y ciertamente legal, de patear cada emoción en el trasero.
No soy una persona fría y apática, al contrario, tengo un fuego que fluye dentro de mí, pero con el tiempo he aprendido a canalizar cada emoción dentro de mí. Lo hago por protección hacia el mundo, hacia las personas.
Se podría decir que tengo una relación de amor y odio con la gente. No confío fácilmente pero cuando sucede, pongo mi corazón en ello. Y ese es exactamente el problema...
Tengo una familia maravillosa, una hermana menor llamada Rose y amo profundamente la vida. Pero hay momentos y situaciones a las que a veces simplemente tenemos que rendirnos.
Rendirse no es un verbo que uno pueda asociar conmigo una vez que me conoce, de hecho, yo diría todo lo contrario, no soy el tipo de persona que se rinde, es más, he aprendido a vivir sin apegarme demasiado. a nada y sin permitir que otros, en consecuencia, se apeguen a mí. Es mejor así.
Eso no significa que mi vida apesta. De hecho, todo lo contrario… Aunque quizás tendría algo de qué quejarme…
Cuando llego a casa estoy todo sudado, y hasta un poco cansado, pero en perfecta contradicción, me siento lleno de energía.
Me doy una ducha que me relaja por completo. Me visto y a los pocos minutos ya estoy en el metro rumbo a Golem's Legacy.
Al igual que la primera vez que me siento como pez fuera del agua, no he cambiado mi forma de vestir, esta soy yo.
Con el habitual pase de visitante entro y me dirijo directamente a los ascensores. Espero la lata, salgo y de inmediato me doy cuenta de Rachel, señorita Rachel.
Al igual que la primera vez, hay muchas chicas esperando para ser entrevistadas.
Fantástico.
Los veo desfilar, uno tras otro, durante aproximadamente una hora. Algunos salen llorando, otros enojados, algunos parecen querer tirarse debajo de un auto.
Si hay algo que he entendido es que señor soy el pendejo más grande del mundo, es así... pendejo.
- Señorita Whiskys...es su turno.
Ay que bonito, me desmayo de felicidad.
SHANE
La puerta se abre y llevo mi perfecta sonrisa de ángel en mi cara.
Le agradezco a la asistente y con un movimiento de cabeza la dejo.
Bueno, bueno, bueno, nosotros dos, niña.
- Buenos días señorita Whiskies... -
Ella me mira como si tuviera algo vagamente similar al monstruo del bloqueo frente a ella.
Pero noto con satisfacción y diversión como ella también luce una sonrisa que no podría ser más falsa.
- Buenos días Sr. Golem. Es un verdadero honor estar en su presencia. Dime, estoy bastante pasable vestida así... Me hubiera gustado encontrar una crema para tapar los tatuajes también pero ya sabes cómo es... Me importa un carajo tu opinión así que... -
Esa lengua... Esa lengua larga...
Y en mi mente se forman las muchas maneras en que tuve el placer de conocer ese lenguaje.
Y no, definitivamente no es este.
- Es lindo hoy en día encontrar una chica buena, educada y sobre todo con tal vocabulario... Cómo decir... florida... -
- Sincero... -
- Bastante colorido. -
La niña resopla.
- Entonces... Yo diría que empecemos ahora mismo... ¿Por qué quieres trabajar para mí? -
Se echa a reír, lo que me pone muy nervioso.
- Aclaremos una cosa, no quiero trabajar para ELLA, acabo de responder a una oferta de trabajo. Parar, terminar. El hecho de que el trabajo en cuestión sea con ella, para ella o como le plazca, en realidad no cambia la cuestión. Necesitaba trabajar y aquí estoy... -
Dios mío, es todo un pimiento nervioso. Tiene fuego dentro... Puedes verlo.
- Leí tu CV... Y tengo que decir que está un poco... Desnudo... -
Él suspira.
- ¿Por qué quieres cambiar de trabajo? Quiero decir, ella era camarera, ¿verdad? Pasar de camarero a niñera... es un poco... extraño. -
La veo centrar sus ojos en mí y una vez más me siento atraído por ella.
- Podría haber sido cualquier cosa. No aspiro a ser niñera toda mi vida, aunque me gustan los niños... -
- ¿Tienes hijos? - le pregunto directamente.
- Erm..no..pero ..-
- ¿ Alguna vez has hecho este trabajo antes? -
- No.. -
- ¿ Y cómo puede decir que le gustan los niños si no sabe lo que significa estar ahí y convivir con ellos las veinticuatro horas del día? -
Cierra los ojos.
- Tengo una hermana menor... -
- Tiene una hermana menor... -
- Si es... -
- ¿Vives con tus padres? -
- No... -
- ¿Entonces vives sola y tu hermana vive con su familia? -
- Sí... -
- Entonces podríamos decir que en realidad... No tienes que tratar personalmente con tu hermana... Pero son tus padres quienes lo hacen... -
- Pero ¿¿siempre haces entrevistas de trabajo así?? -
Yo sonrío.
- Estoy bien, ¿eh? -
- Sí... Bravo es exactamente el término que tenía en mente.... -
Mi sonrisa se amplía. Después de todo, no es tan malo. Puede soportar la presión, el aluvión de preguntas... lástima, si no hablara nada sería casi perfecta.
- Mira... entendí tu jueguito. Y aunque realmente quiero que me sigan tomando el pelo... oh lo siento, pasar el rato en tu casa... me voy... Y no, gracias, no te molestes en acompañarme hasta la puerta, eso Fue todo demasiado delicioso... -
- No creo haber dicho que la entrevista había terminado Señorita Whiskeys... -
- No creo haber dicho que estaba interesado en el Sr. Golem... -
Lamo mis labios con la punta de mi lengua. Maldita sea, ella es hermosa... hermosa y atrevida.
Camina rápidamente hacia la puerta.
- Ella está contratada... -
MARÍA