5
Al poner un pie en esa casa un olor a cigarrillos y alcohol invadieron mis fosas nasales, personas bailando, la poca iluminación me impedía ver un poco, habían luces de todos colores como en una discoteca, la verdad solo había asistido a una en toda mi vida. Sentí miradas en mi, la casa era grande, se miraban las escaleras en tan solo la entrada que daban al segundo piso, también pude notar a algunos chicos del instituto.
—No te vayas a perder —me susurró Víctor muy cerca de mi oído. De inmediato me giré a ellos, Colton Dashner estaba arrecostado en una pared, poniendo su pie en ella, fumando un cigarrillo, mientras me observaba, analizándome. —¿quieres algo de tomar?
—Agua, por favor —elevé mi voz para que fuera audible.
Victor rió, y pude notar como Colton bufó.
—¿Que te parece algo más fuerte? Como... ¿una cerveza? —insistió Víctor.
Nunca en mi vida había probado una cerveza y no lo haré tampoco, solamente vine siguiendo a un chico para averiguar en qué andaba metido, pero en ese momento me di cuenta de algo más importante, y es que era el hecho de que tenía a dos personas hablando conmigo.
—No tomo, la verdad —sonreí un poco incomoda. Las únicas dos personas que me hablaban pensarían que era una aburrida
—Está bien, yo respeto eso —Víctor elevó las manos en forma de paz y sonrió, retrocediendo—. Iré a buscar una para mi.
Se perdió entre tanta gente que bailaba y se caía de borracha. Me sentía incomoda en un lugar así, con personas así. En este momento solo quería irme a casa, miré a Colton, quien observaba a otro lado, seguí su mirada. Había unas chicas allí, sonriéndole y coqueteándole de lejos. Rodé los ojos para mi misma y me crucé de brazos.
—¿Aburrida? —su voz me hizo verlo de nuevo— Si quieres puedes irte.
Apreté los labios formando una sola línea.
—No me iré sola —recriminé—. ¿Donde está el baño? —cuestione. Necesitaba aclarar mi mente, las luces y la música me estaban mareando.
Colton señaló un pasillo, así que de inmediato me reincorporé, soportando los empujones de las personas, pero antes de llegar al pasillo dicho por Colton, choque contra alguien. Más bien con el pecho de alguien. Elevé mi vista.
—Perdón —articule, separándome un poco. El chico era alto, casi la altura de Colton, tenía el cabello rojizo y por lo que pude sentir era fuerte. Sus labios se curvaron en una sonrisa.
—Fue mi culpa —dijo—. ¿Ibas a algún lado? —quiso saber.
—Al baño, necesitaba algo de silencio.
Sonrió de lado.
—Yo tengo la solución —me tomó de la mano sin darme tiempo de protestar, me llevo por una puerta, saliendo al patio trasero. Y, como él había dicho, la música era menos audible. Se lo agradecí en ese momento—. No te había visto nunca por aquí.
—No, soy de otro barrio —puse mis manos detrás de mi espalda.
—Se de donde, el barrio vecino, la clase más alta que la nuestra, ¿no? —se sentó en una silla que recién se encontraba allí.
—Si.
Me estaba poniendo un poco nerviosa ya que era extraño que otra persona me hablase y menos con las fachas que traía, ¿acaso seguía dormida? Además el chico no era para nada feo y no tenía tatuajes como Colton, y tampoco he visto que sacara un cigarrillo para fumar.
—Soy Darren.
—Monique.
—Monique... —pronunció mi nombre como recordando algo—. ¿Eres de Francia acaso? —quiso saber frunciendo un poco su ceño en mi dirección.
Era la primera persona que lo notaba.
—Si, mi papá se mudó aquí cuando mi hermana y yo teníamos 10 años, —sonreí.
Un nuevo comienzo.
Colton.
Sacudí mi cabeza para dejar de pensar en ese chico y me concentre en el que estaba frente a mi.
—¿Tú hermana y tú tenían la misma edad? —se notaba confundido.
—Si, tengo una hermana gemela.
Abrió los ojos sorprendido, para luego reír un poco.
—Vaya, eso sí que es genial.
Asentí, para después darme cuenta de que quizás había tardado un poco y Colton me ha de estar buscando.
—Me tengo que ir —anuncie, retrocediendo un poco.
Darren se puso de pie de inmediato.
—Te acompaño.
—Está bien.
Volvimos a entrar a la casa, esquivando personas hasta llegar donde se encontraban los chicos, pero me detuve en seco al ver lo que tenía frente a mi. El estómago se me revolvió en ese momento. Colton estaba en el mismo lugar que lo había dejado, pero no estaba solo. Había una chica rubia allí, besándose con él.
—¿Vienes con Colton acaso, Monique? —Darren se posicionó a la par mía, pude notar molestia en su voz. Lo miré, miraba a Colton con odio.
Solo quería desaparecer en ese momento, y yo que pensaba que quizás me estaría buscando.
—No, no vengo con el —farfulle, girándome a él—. Adiós, Darren. Un gusto conocerte —palmee su hombro, para luego dirigirme a la puerta.
—¡Monique! —me llamó un poco alto, apuesto a que Colton escuchó, o quizás no. Me giré a Darren que se acercó a mi—¿te volveré a ver?
Dude, la verdad no creía.
—No lo se —admití.
—¿Tienes con quien irte? ¿Auto?
Negué, pensaba irme sola.
—No te irás sola, vamos, te iré a dejar. —me tomó de la cintura, haciendo que sume girase. Segundos antes de salir por la puerta principal sentí como Darren retiraba su mano de mi de manera brusca. Me giré a él, solo para comprobar que él no había sido quien la había quitado, sino Colton. Empujó a Darren a la pared para luego darle un golpe en la cara.
Me cubrí la boca por la sorpresa, pegando un grito ahogado, es que no entendía nada, todo sucedió tan rápido.
¿Que le pasaba?
—¡Colton, déjalo! —exclame. Los presentes detuvieron su baile y ahora hicieron una rueda entre nosotros, gritando en coro: pelea. No podía creer que apoyaran esto.
Colton no paró, sino que siguió dándole de golpes a Darren en el suelo, pero Darren no se defendía, yo no podía seguí ahí, no podía presenciar algo como eso. Me enfermaba. Giré sobre mis pies, abriendo la puerta y salí corriendo lo más rápido que pude de allí.
Llegué a la acera, corriendo por donde antes había venido Colton, si tenía suerte recordaba la calle.
—¡Monique!
Detuve mi paso por una milésima de segundo al escuchar la voz de Colton, así que apresuré el paso.
—¡Joder, detente!
Sus pasos se escucharon cerca, luego unos brazos me tomaron de la cintura, haciéndome girar a él.
—¿Que demonios pasa contigo? ¿Acaso no ves que es peligroso ir de noche por esta calle? ¡Eres una inconsciente! —espetó, tomándome por sorpresa. Me aleje de él.
—¿Porqué le has pegado? —quise saber, la voz se me estaba quebrando. Era demasiado sensible para estas situaciones.
Respiró profundo, llevándose una mano al cabello, despeinándome más. Resopló, mirando al cielo para luego mirarme a mi.
—No te incumbe —espetó, pasándome de lado y caminar por la acera—. Ahora camina.
Me quedé un momento quieta por la actitud de Colton, era grosero. Al final empecé a caminar detrás de él. El camino fue silencioso, pude notar mi casa más adelante. Caminé a paso rápido hasta posicionarme a la par suya. Tenía la vista fija en la calle, sin expresiones.
Mordí mi labio inferior queriendo decir algo pero no se me ocurría nada, ni siquiera sabía si me seguiría hablando después de lo qué pasó.
—Gracias por no dejarme venir sola —murmuré algo bajo. Estaba un poco apenada.
Pero no contestó, al estar frente a mi casa le di una última mirada.
—Entra —me miró, después de que no lo había hecho en todo el camino.
—Adiós, Colton.
Me giré para caminar, sintiendo su mirada en mi. Había terminado igual o peor que antes porque no había averiguado nada de Colton Dashner, solo sabía que era mujeriego y se metía en pleitos por nada ¿habrá tenido algún problema con Darren? Porque no sabía porque lo había golpeado, tampoco porque sus cambios de humos tan repetidos, tampoco sabía porqué lo buscaba la policia.
En realidad no sabía nada de Colton Dashner.
Nada.