Librería
Español
Capítulos
Ajuste

Amigos

—¡SALTA,MATÍAS..¡SALTA!..

—¡No! voy a ahogarme,no voy hacerlo.

—Te estaré esperando aquí,hazlo,tenme confianza.

Lanzó un suspiro cansado mirando hacia la soga que el mismo Noé había amarrado sobre una fuerte rama,la tomó entre sus manos y la apretó con fuerza a la espera de que el miedo dejara de hacer mella en su cuerpo. No podía evitar sentirse asustado,jamas había hecho nada parecido,sólo hasta que Noé había entrado a su vida que había dejado de sentirse solo. Él lo animaba a vivir,le mostraba cosas que nunca imaginó podían llegar a gustarle,como el correr por los campos,dar de comer a los animales,ayudar a los peones y ahora eso. Estaba parado encima de una piedra,a punto de dar un salto al agua y no terminaba de juntar el valor,luego sus ojos bajaron hacia Noé, que estaba sumergido hasta la cintura y con los brazos abiertos para él, esperando por él. Se llenó los pulmones,apretó los ojos de la misma forma en que apretaba la soga entre sus manos y dio un paso hacia atrás. En el momento en que se sintió un poco menos nervioso,se dejó caer. El agua se le metió por los oídos y en un segundo todo se volvió negro,unas manos tomaron su pecho y a los pocos segundos ya estaba fuera del agua tomando aire a bocanadas.

—¡Matías! ¿estás bien?—El rostro de Noé se miraba preocupado,y una arruga se formó en su frente,Matías contempló ese detalle. Se forzó a formar una sonrisa y sacudió su cabello frente a la cara tensa de Noé.

—Sí,estoy bien.

Sólo hasta que Noé se aseguró de que fueran sinceras sus palabras relajó su postura. Después, sin esperarlo,Noé lo tomó con fuerza entre los brazos estrechándolo contra su cuerpo. Matías se sintió tenso de pronto al sentir la piel desnuda de Noé contra la suya. Se sentía suave y caliente y su corazón brincaba dentro de su pecho.

—No sé en que pensaba al pedirte hacer eso—Noé se despego para poder mirarlo a los ojos. Tenía las manos sobre sus hombros y los estrachaba un poco sin dejar de verlo.

No supo que contestar a eso. Noé se preocupaba por él, realmente se preocupaba.

Su cercanía lo ponía nervioso,pero le gustaba sentirse querido por Noé. Él era demasiado especial y que alguien como Noé lo quisiera también lo hacia sentir especial. Noé podía hacer de todo,cada cosa que le veía hacer le parecía maravillosa. ¿Porqué se sentía de esa forma por su amigo?

*

En el último día de la semana sentados todos en la cena,Nabor había preguntado a Clemente si sabía cuando tendría que volver Noé a la capital,pues el había decidido no mandar a Matías al internado en el que estudiaba.

—No,pero es en la semana próxima patrón-la respuesta de Clemente fué totalmente inesperada para los adolescentes.

El par de chicos se giraron para verse con curiosidad y temor que recorrió parte de su cuerpo. Matías se sintió molesto con su padre por haber preguntado eso,y con el padre de su amigo por la respuesta tan cortante que había dado.

—¿Porqué no consideras la opción de que estudie aquí?. En la escuela del pueblo con Matías.

Clemente pareció agobiado y miró a su hijo de reojo,para después responder a Nabor.

—No se ofenda patrón,pero en la capital hay mejores opciones para mi hijo,estudiará medicina,ahora que puedo costearla, es una excelente carrera para él,que es tan noble y le gusta servir a los demás.

Nabor asintió con la cabeza y entendió que Clemente quisiera una buena carrera para su muchacho,en Santa Clara no había futuro para un muchacho tan brillante como Noé. Matías no era tan decidido como Noé, pero en nobleza nadie se le comparaba.

—Padre ¿puedo estudiar medicina también?—inquirió Matías.

—Lo siento hijo,pero tu tienes que estudiar algo relacionado con la hacienda. Tu serás su dueño y por consiguiente tendrás que hacerte cargo de ella.

Las miradas que ambos chicos se profesaron fue de resignación,tendrían que estudiar por separado,verse sólo en vacaciones y fechas especiales. No podían contradecir a sus padres, aunque en el alma desearan por primera vez hacerlo. Se les hacia tan injusto que los separan por ese motivo,por su futuro que al final de cuentas faltaba tanto para eso,que no era como que fuesen a ser hacendado y médico para dentro de poco,faltaban años,años para eso.

—Matías ,tendrás entonces que despedirte bien de Noé—Mencionó su padre,mientras limpiaba su boca por una servilleta.

—Nos seguiremos viendo padre,cada que él venga ¿verdad Noé?

Nabor se giró para ver a Clemente que al parecer no le había planteado a su hijo cual era la situación de irse a estudiar a la capital.

—Joven Matías—Interrumpió Clamente—lo que pasa es que mi hijo se va,y no va a regresar hasta terminar la carrera,le dan la posibilidad de estudiar con una beca—miró a Noé al tiempo de mencionarlo — Por eso se va y no va a volver hasta dentro de mínimo diez años...

—¿Que? Debe ser una broma ¿verdad padre? ¡Usted no me había dicho semejante cosa!.

Clemente le dio una dura mirada.

—Noé,calmate,te estas comportando mal en la mesa junto a los patrones—dijo su padre.

—No,no se lo puede llevar de esa forma,no por tanto tiempo. Padre,haga algo por favor,que no se lo lleven padre,hago lo que usted quiera,lo que me pida padre pero por favor ,que no se vaya...

Noé sólo lo vio con el semblante triste,conocía a su padre y sabía que eso de nada serviría,al contrario tal vez y hasta lo empeoraba. Ahora su padre vería a su amigo como un caprichoso que con sólo pedirlo todo se le cumplía.

—Lo siento joven,pero en la educación de mi hijo decido yo,espero que no se ofenda patrón pero es lo que pienso y siento.

Clemente bajó el rostro contrariado,pero al mismo tiempo molesto con tan sólo pensar que alguien mas pudiera opinar sobre lo que él consideraba que era lo mejor para su hijo. La intervención del hijo de don Nabor no le agradó en lo mas mínimo, pero entendía que el muchacho se sintiera desesperado, las ultimas semanas los había visto muy juntos,un poco demasiado para su gusto,sin embargo no dijo nada por respeto a su patrón.

—No te preocupes Clemente,te entiendo,creéme,pero es sólo la pesadez de ver a mi hijo así.—Nabor entendió,pero quizá su hijo no—Ya escuchaste a Clemente hijo,nada puedo hacer yo.

Matías se levantó de la mesa completamente descompuesto,su amigo se había quedado mudo,no se había defendido,no había objetado nada,había aceptado todo sin decir nada.

Noé se giró para ver a su padre con el rostro lleno de dolor y reproche,pero el hombre sabía que su hijo a pesar de su molestia lo obedecería.

Noé lo único que pudo hacer fue pedir permiso para retirarse de la mesa,no tenía apetito ni ganas de seguir viendo a su padre,que ahora se volvió tan injusto a sus ojos.

Se dirigió a la habitación de Matías. Tocó pacientemente,pero no recibió respuesta.

Se encaminó a su propia habitación, se sentó al borde de la cama,con los puños apretados y los ojos trémulos.

Cuando se encontró Noé solo en su cuarto,su padre entró a éste pidiendole a su hijo hablar con él,tampoco quería malos entendidos con su único hijo,quería que supiera las verdaderas razones que tenía para actuar asi,y no sólo era que quisiera verlo lejos de él o de su amigo.

—¿Podemos hablar hijo?.

-—Sí,padre...pase.

—Hijo,no quiero que tengas ideas equivocadas de las razones que tengo de que estudies fuera,hijo mío. Tu ahora eres feliz,puedo verlo,pero eso no lo es todo en la vida—Se explicó,de la forma en un hombre campo podía,y dejando entender sus verdsderas razones—¿Que harás cuándo crezcan tú y tu amigo y te des cuenta que no pueden hacer las mismas cosas porque no tienes ni la posición ni la manera de hacerlas? por ejemplo.

¿tú crees que siendo un simple peón serás el mejor amigo de Matías?..¡piensalo!...no lo creo hijo,jamás podrán ir a las mismas reuniones,porque simplemente tú no estarás a la altura de sus otros amigos,porque ahora eres el único,pero ¿por cuánto tiempo? van a crecer y ya no serás ni el único,ni el mejor...Se volverá el dueño de ésto—Señaló con sus manos alrededor—y aunque desee permanecer a tu lado no podrá hacerlo,porque sus fabulosos amigos te verán por debajo de ellos,y pondrás a tu amigo en la difícil situación de elegirte a ti o a ellos.Y creeme que será difícil. Pero si quieres seguir a la altura de Matías, ganatelo,hazlo,no permitas estar por debajo de él,permanece a su lado,no por debajo. Él no tiene la culpa de haber nacido en buena posición, ni tú de no tenerla. Pero tendrás que esforzarte más y él no. Así que él nada pierde quedandose, tú sí,su amistad a largo plazo!-¡Piensalo!.

Su padre lo dejó ahí,sumergido en ese mar de dudas,pero tenía razón ,¿por cuánto tiempo se podría decir que serían los mejores amigos?,ahora sólo era porque él era tan tímido que jamás se había acercado a nadie hasta que él mismo lo había hecho.

No serían amigos de no haber empezado él primero,la duda lo calcomanía,pero y ¿porque la razón de tanta pesadez y dolor?-jamás se había sentido así en su vida, que algo le produjese tanta confusión y pena.

*

Era cerca de la media noche cuando escuchó la perilla de su puerta girar,vio la silueta de Matías en la oscuridad,lo vio acercarse a la cama.

Levantó las mantas con las que se cubría Noé y se metió en la cama.

En un acto desesperado,Matías abrazó a Noé por la cintura hundiendo su rostro en el pecho de su amigo.

—No te vayas,por favor no te vayas,no me dejes aquí solo sin ti.

El lastimoso sollozo de Matías lo descompuso totalmente. Él tampoco deseaba marcharse,no quería lastimarlo.

—¡Matías! debes entender que no depende de mi el poder quedarme contigo aquí,es una decisión que mi padre ya tiene tomada y para mala suerte mía o nuestra, ni tu padre puede hacer nada por hacerlo cambiar de opinión.

Tomó su rostro entre las manos para mirarlo—Pero tú siempre estarás en mi corazón y debes prometerme que yo estaré siempre en el tuyo y que jamás se lo entregarás a nadie que no sea yo.—Le levantó el mentón al rubio para que lo mirara.

—¡Te lo prometo Noé!.

El moreno le depositó un beso sumamente apretado en la frente a su amigo en agradecimiento a su promesa.

Matías no podía imaginar que hubiera mejor lugar en el mundo que en los brazos de su mejor amigo,le traía un poco de paz esa cercanía.

Su sollozo se había calmado en alguna hora de la madrugada,pero despertó y lo hizo solo en la cama de Noé,él ya no estaba

Se levantó apresurado a buscarlo,pero no lo encontro por ningún lado,abrió las puertas del armario por instinto,sentía un vuelco en el estómago que le decía que lo hiciera,sentía pavor de comprobar lo que imaginaba pero no había mas opción que hacerlo.

Al abrirlo sintió una punzada desgarradora en el alma,no había nada ahí,nada de las pertenencias de Noé.

En la madrugada el padre de Noé había entrado en la habitación de su hijo para avisarle que debían partir a la capital una semana antes para hacer el tramite de la beca que le darían. Clemente no deseaba que la cercanía del hijo del patrón arruinara el futuro de su muchacho. Pero al ver a Matías con su hijo así abrazados se horrorizó y lo levantó de un estrujón,Matías no se había dado cuenta por la pesadez de su sueño. El cansancio y el llanto lo habían vencido completamente.

-¡Jamás,jamás debes dormir de esa forma con otro hombre! eso es inaceptable Noé—le dijo su padre con el ceño fruncido y la mirada llena de molestia.

Lo hizo sentir culpable,¿Que pensaría su padre si los hubiese visto al momento que Matías lloraba? No,no quería imaginarlo,no quería que por eso le prohibiera verlo.

—Sólo nos quedamos dormidos despidiendonos,no pasó nada. Ni nos dimos cuenta.

Su padre lo miraba con aprensión. Pero al menos el tema había quedado de lado el resto del camino.

*

—¡Catalina,Catalina!—gritó Matías con llanto ahogado..

—¿Que pasa?

—¡N-noé!..¿do..dónde está?

—Lo siento Matías,pero su padre se lo llevó muy temprano a la capital.

Sus piernas flaquearon, pero eso no le impidió que reaccionara como lo hizo.

Matías salió corriendo con el alma en la boca y la cara empapada en llanto.

Corrió y corrió por todo el campo de trigo,descalzo como iba. Le ardían los pulmones,malditamente dolían. Pero mas le dolía la partida de su amigo y que nadie le hubiera avisado.

¿Que no se daban cuenta que no lo volvería a ver hasta dentro de muchos años y él no podía vivir así? sin él...

-¡NOÉ!NOÉ,NOÉ..gritó a todo pulmón..¡regresa!-¡lo prometiste,lo prometiste!. Dijiste que estarías conmigo siempre...

Sus rodillas se doblaron cayendo inevitablemente al suelo húmedo.

hipeaba a cada bocanada de aire que tomó,comenzó a sentir de vuelta esa picazón que da en la nariz cuando estas apuntó de llorar.

Su cuerpo se quedó inerte, en el suelo frío, había colapsado tal cómo lo hiciera al enterarse que su madre y hermana habían muerto.

Los peones lo buscaron por todo el campo,lo encontraron recostado sollozando.

—¡Patrón!! ¡Acá está el niño!-gritó..Chucho,un joven de escasos dieciocho años.

Nabor vio a su hijo tirado,sollozando de la misma manera que lo había encontrado después decirle que mamita y Mirna su hermanita menor ya no volverían,que se habían ido al cielo para cuidarlos a ambos.

Su corazón se arrugo de pena,su hijo era tal débil y dependiente. Que sintió pena por él,pero trataría de ayudarlo a salir de su estado como pudiera.

—¿Porqué padre? ¿porqué se fue?..pronunció esas tristes palabras en un hilo de voz.

—Lo verás de vuelta hijo,a él lo volverás a ver ¡lo prometo!-Pensaba que estaba sintiendo la ida de su amigo como una perdida,como la perdida de su madre,él no tuvo malas ideas para con su hijo.

Los siguientes días serían difíciles lo sabía, su hijo se encerraría de vuelta en si mismo y no sabía cómo evitarlo.

Descarga la aplicación ahora para recibir recompensas
Escanea el código QR para descargar la aplicación Hinovel.