Prólogo.
- ¿Dónde está mi hijo?
-¿Su hijo? Perdón, ¡pero yo no lo conozco y no sé quién es su hijo!!!
- ¡DEJA DE MENTIR, ME DROGASTE Y TE METISTE A MI CAMA HACE TRES AÑOS Y TUVISTE UN HIJO, ¡ESE NIÑO ES MÍO Y LO QUIERO AHORA!!!
-Señor, no sé quién es usted y le aseguro que yo nunca he estado en su cama, mucho menos he estado embarazada o tenido un hijo.
Alexeí lleva la mano a la pistola que siempre lleva y sacándola, la acerca a ella que no se ha movido y pone la pistola en su cabeza amenazando con disparar si no habla. Baja un poco sus bragas y noto una cicatriz a un lado de su vientre por lo que le pregunta.
-Si no tuviste un hijo ¿de qué es esta cicatriz?
-Es de una apendicetomía, está muy de lado para ser una cesárea ¿no cree? – aurora le responde con un tono sarcástico.
-A mí no me hables con sarcasmo perra, estas en mis manos y si lo deseo hoy mismo morirás