Capítulo 3
Dejar todo en Nueva York para venir hacerme caso de los negocios de papá es sumamente difícil para mi.
Llevo desde los quince años viviendo en Nueva York y la mayor parte de mi vida la he construido allá.
Tenía un trabajo, un hogar pero sobre todo mi libertad sin tener a mi familia cerca cuestionando mi vida.
El accidente de papá fue algo que nos afecto a todos. El simple hecho de pensar que lo podíamos perder era un dolor que no estaba preparado para asumir.
Tener que tomar el mando de todo es una terea agotadora, pero nada que no pueda manejar.
El teléfono de la oficina suena sacandome de lo más profundo de mis pensamientos.
—Digame señorita.
— Señor, disculpe que lo moleste pero su tío el señor Luis Lombardo lo busca .
¿Mi tío?
— Déjelo pasar .
Cuelgo la llamada y me preparo para recibirlo.
Ni siquiera sabía que mi tío había llegado a la ciudad.
La puerta de la oficina se abre y entra sonriendo.
—La última vez que te vi eras un adolescente inquieto —Se acerca abrazándome —. ¿Qué tal estas sobrino?
—Bastante bien tío, ¿Qué te trae por acá?
Toma asiento y yo regreso a mi silla.
—Hijo, necesitamos hablar —Su mirada se torna sería —. Estuve visitando a tu padre y lo que he dicho me ha dejado algo mal.
—¿Qué te ha dicho?
—Tu padre acaba de firmar un documento con los abogados y un notario.
—¿Un documento? —Asiente —. ¿Qué tipo de documento?
—Uno donde deja claro que tu eres su heredero universal el cuál y el cuál llevará su patrimonio, al igual qud empresas y negocios.
—No entiendo para qué está haciendo esto tío, si papá no morirá aún.
—Esto no es lo peor hijo.
—¿Hay algo más?
—Tu padre dejó una cláusula la cuál dice que si no te casas en los próximos cuatro meses te desheredara de todo su patrimonio y este sera otorgado a tu abuela para ella disponer se él.
"Papá se ha vuelto loco"
—No puedo creer lo que estás diciendo tío —Río negando —. ¿Por qué mi padre haría eso?
—Debido al golpe recibido los médicos no le dan muchas esperanzas y puede que alargó plazo esto traiga consecuencias mortales en su salud.
—¿Por qué nadie me había comunicado esto? —Espetó furioso.
—Fue decisión de tu padre hijo.
—Papá sabe que pienso respecto am matrimonio —Golpeó el escritorio —. El matrimonio no está en mis planes tío.
— Pues, ve incluyéndolos hijo, porque tú padre ya firmó ese documento y en nada los beneficia a ti, a tu madre y a tu hermana si no cumples lo establecido.
—Papá nunca desamparia a mamá ¿Por qué hace esto?
—Tú padre sabe que jamás dejarías a tu madre desamparada, además quiere verte casar antes de morír.
—El no va a morir.
—Eso es algo que aún no sabemos hijo, pero esa es la última decisión de tu padre.
—No voy a permitir que la fortuna de la familia caiga en manos de la abuela, ella no soporta a mamá.
— Pues hijo ya sabes ,es mejor que le vayas pidiendo matrimonio a tu novia —Se levanta y palmea mi hombro —. Me imagino que tienes una ¿O sigues con tu vida de soltero codiciado?
Más que una pregunta sonaba cómo un reproche.
—Claro que tengo novia tío —Miento descaradamente —. No pensaba formalizar, pero dada las circunstancias estoy obligado hacerlo.
"En que diablos me estoy metiendo"
— Bien hijo alguna duda sabes dónde encontrarme —Me extiende su mano y se la recibo —. Tú madre quiere que vayas a casa pronto.
—¿Te estás quedando en casa de mis padres o en la ciudad?
—En casa de tus padres, pero regresaré pronto a Toronto.
—Esta bien, tío —Le doy un abrazo antes de irse —. Dile a mamá que pronto estaré visitándolos.
Se retira de mi oficina y quedo completamente pensativo, sin saber que hacer.
¿Que carajos voy hacer?
Necesito encontrar una novia pronto, pero lo más importante que este lo suficiente demente para acceder a casarse conmigo pronto.
"Necesito desahogarme con alguien o moriré"
Tomó mi teléfono, marco el número de Carlos y luego de dos pitidos contesta .
—¿Te acordaste que tienes un mejor amigo que no has llamado desde que estás aquí?
— No seas idiota, necesito desahogarme o moriré .
—¿Qué tan grave es la situación?
— Hablamos de matrimonio hermano.
— Eso suena muy grave, nos vemos en el restaurante que está a dos cuadra de la empresa de tu padre en diez minutos.
—Ya salgo para allá .
Cuelgo la llamada , guardo mi teléfono , me coloco mi saco y salgo de mi oficina.
Me percato que la señorita Campbell ya no se encuentra y recuerdo que le di el resto de la tarde libre .
No sé que tiene esa mujer, que me hace querer perder el control cuando la tengo cerca. Es cómo si me olvidara de mi cordura y mi impulso tomará posesión de mi .
Tomó el elevador, marco el piso de recepción. Al llegar salgo a la entrada del edificio dónde ya me espera mi chófer.
Me saluda estrechando mi mano , abre la puerta para subir. Camina hacia el asiento del piloto subiéndose y colocando el auto en marcha .
Al llegar al restaurante entro y veo a Carlos sentado en una de las mesas. Me acercó a él, se levanta y nos saludamos con un abrazo en forma de saludo .
Un camarero trate dos tragos de whisky y los coloca en la mesa.
—Por la cara que traes, veo que es grave amigo —Tomamos asiento —. ¿Explícame que está sucediendo?
—Prácticamente estoy obligado a casarme.
Le cuento a Dante la decisión que ha tomado papá luego de su accidente y me mira completamente asombrado.
— No me jodas Alex, a tu padre el golpe le afecto bastante.
—Cada vez que pienso en eso me dan ganas de matar a papá.
Amo a mi padre, pero lo que ha hecho es una terrible decisión.
¿Casarme?
El sabe perfectamente que luego de lo sucedido hace años atrás, la palabra matrimonio no esta en mi vida.
— Bueno amigo, aquí lo importante es de donde sacaras una prometida . —Me mira pensativo y niega.
— Ni me lo digas, no sé en que carajos me ha metido mi padre.
Frotó mi rostro con las palmas de mi mano en un gesto de frustración. Y es que siento que la cabeza me va a estallar con todo esto que esta pasando.
— Puedes decirle alguna de tus conquistas de una noche —Masculla divertido —. Estoy seguro que ellas estarían más que encantadas de ser tu prometida y esposa.
— ¿Te has vuelto loco? —Replicó molesto —–. A la hora de divorciarme no querrán hacerlo sin antes tener la mitad de mi dinero o en tal caso se involucraran sentimentalmente.
—Entonces, ¿Qué piensas hacer hermano? porque no le veo solución a tu gran problema.
Niega y se reclina suspirando.
— Ya se que hacer —Susurro pensativo y me mira confundido —. Pienso conseguir a una mujer que se haga pasar por mi novia y acepté un contrato de matrimonio por un año.
—¿Qué vas hacer qué? —Levanta la voz —.¿Estas loco amigo? nadie se prestaría a gran locura.
— No estés tan seguro —Tomo un sorbo de mi trago —. Siempre hay una mujer dispuesta hacerlo con tal de salir ganando algo de dinero.
Observó distraído todo el lugar, hasta que un instante mi mirada se detiene en una de las mesas apartadas.
En ella se encuentra la señorita Campbell almorzando entre risas con un tipo. Él mismo tipo que estaba con ella anoche en la discoteca .
Una sensación de enojo me invade y aprieto mis puños tratando de controlarme.
¿Por qué me enoja tanto verla con él?
El hombre se da cuenta de mi insistencia en mirarlos y le dice algo a ella haciendo que se gire mirando hacia nuestra dirección.
Al darse cuenta de mi presencia, me mira sorprendida y regresa la mirada a él.
¿No que no era su novio?
Los amigos no se tratan como se trataron ellos ayer. Estaban de una manera tan comprometedora en la discoteca.
—Hermano ¿Me estas escuchando? —Carlos agita sus manos frente a mi sacándome de mis pensamientos —. Hermano ¿En qué tanto piensas?
—En nada —Retomo mi postura y sonrió —. Ya tengo a la persona que me va ayudar.
—¿Quién amigo?
— Ya lo sabrás pronto...