Capitulo 3. ¿Mi nombre? Y ¿Sino quiero?

—Señorita disculpe en mi país todavía es medio día, podría decirme ¿Dónde se encuentra? Y claro también me gustaría saber su nombre –dijo un modesto y educado Gael.

El tono del hombre tenía a una mareada Elora anonadad con la voz tan fuerte, poderosa y sexy de ese hombre misterioso —¿Mi nombre? Y sino quiero decírtelo, ¿Por qué debería decírtelo? Me llamas y no sabes quién soy -el tono de Elora se volvió frio y lleno de un tipo de hostilidad hacia Gael.

Cosa que dejo a Gael más interesado en la misteriosa mujer, su voz cambiante era una muestra de que la mujer no era fácil de tratar —Disculpe si fui descortés con usted señorita, pero tengo en mi oficina su hoja de vida y me intereso el perfil de su conocimiento, la llamaba para saber si estaba interesada en el puesto de asistente personal de presidencia y claro el de informática.

—Ya veo era eso –la voz se volvió suave de nuevo —En ese caso me presento guapo, mi nombre es Elora Calista Meyer, mis medidas son 95, 62, 97, soy amante a las aventuras, al otoño, a las risas y la diversión –decía ella con un tono lleno de risas y mimos, dejando a Gael impresionado por la forma tan atractiva de hablar de la mujer

La impresión hacia ella era una atracción extraña, su forma de hablar era dulce pero a la vez fuerte, era precavida pero a la vez liberal

—Me escuchas guapo –preguntó ella, porque no obtuvo respuesta de este

—Sí te escucho y anoto lo que me dices –dijo pícaramente Gael

—Enserio, ahora dime ¿Cuál era tú nombre? Me encanta tu voz, es tan fuerte y hace que mi cuerpo se erice del placer al escucharte –dijo ella sin darse cuenta que cuando despertara al día siguiente se arrepentiría de todo —Vamos dime no te quedes callado –le volvió a decir Elora con una voz suave y sexy

—Me llamo Gael Liam Modrick, tengo 30 años y… –Gael se quedó callado un segundo y no sabía si decirle que estaba soltero o a punto de casarse

—¿Y?

—Nada, solo eso señorita Elora

—¿No tienes novia? Espera no me digas que estas casado –preguntó casi gritándole por el teléfono celular

—No, no estoy casado

—Ufff que bueno, bueno acepto tu oferta, ahora estoy de trabajo en Perú y volveré a Italia mañana, así que mándame la dirección de tu oficina para presentarme temprano al trabajo, mándamelo por WhatsApp

Justo cuando este le iba a decir algo más, escuchó la voz de un hombre diciéndole a ella: —Elo aquí estas, trae ese enorme trasero que vamos a bailar, quiero sentirte cerca –dijo Teo sin darse cuenta que el teléfono estaba todavía en la llamada.

—Teo, dile al equipo que ya voy a irme, debo ir a casa y preparar las maletas para Italia, prepara el avión y todo para regresa a casa –dijo mientras Gael seguía escuchando la curiosa conversación, este iba a colgar pero se quedó ahí escuchando lo que decían hasta que le sorprendió que otra persona dijo:

—Jefa cuídese en el camino, no vaya a manejar borracha, le diré al cabo Tim que la llevé

—No déjalo, yo puedo tomar un taxi, Teo llévate mi coche a la oficina, equipo buenas noches y beban mucho por su adoraba jefa

Todo este dialogo e interacción la escuchó claramente Gael que estaba más curioso por conocer a la misteriosa mujer que llamaban jefa —Cabo, jefa, ¿Qué eres Elora? –se dijo Gael mientras colgaba la llamada para no escuchar más, después de eso añadió el número a sus contactos y le mando un mensaje de WhatsApp

—Aquí está toda la información de la oficinas en Italia, no manejes si estas borracha, cuídate y espero verte pronto

Después de mandar el mensaje se quedó mirando la foto de la mujer con la que acababa de hablar, abrió su cajón y la guardo al lado de una foto de una bella mujer de ojos color miel.

Este seguía pensando en la conversación de esa mujer y en la voz tran atractiva de ella, hasta que el sonido de un mensaje lo saco de sus pensamientos

—Gracias por la preocupación jefe, ya estoy en mi apartamento, tranquilo que también deseo conocerte

El mensaje era sutil pero lleno de emoción, cosa que emociono a un Gael que sonrió como un niño lindo y tierno, sus dientes blancos eran atractivos pero más eran esos dos hoyuelos que se formaron en sus cachetes.

Justo la puerta sonó

—Adelante

—Hermano –entro a la oficina el hermano mayor de Gael Bruno Jean Modrick, el famoso especialista en tecnología biomolecular y bioquímica, una de las ramas de fabricación de la empresa de Gael, su hermano mayor siempre ha sido la persona que siempre lo apoyo desde la desaparición de su madre

—Pasa Bruno, ¿Qué te trae hoy aquí?

—Vine a visitarte y a decirte que el producto final farmacéutico funciono bien y puede ser enviado a Centroamérica cuando lo dispongas

—Ya lo verifico el departamento de investigación

—Sí –dijo Bruno, pero ese sí, no convenció a Gael, porque su hermano algo tenía que le hacía desconfiar de este.

—Bueno espera que yo lo verifique con el personal para poder hacer la aprobación

—Pero hermanito no confías en mí –dijo Bruno algo desconcertado por la forma tan desconfiada de este.

—Sí, pero igual debo verificarlo Bruno, y bueno sino tiene más nada te pido que te retires, tengo una reunión –se miró el reloj de la muñeca —En 10 minutos

—Listo hermano nos vemos entonces

Después de que Bruno salió, Gael llamo a su mano derecha y mejor hombre de confianza

—Dígame jefe

—Bruce averíguame si mi hermano volvió a interferir en los mecanismo por favor

—Me pongo en eso de una vez

Justo antes de colgar se escuchó la voz poderosa de Gael —Bruce

—Sí jefe

—Podrías averiguarme todo sobre una mujer

—¿Una mujer señor?

—Sí, por favor se discreto que nadie se entere, solo confió en ti

—Claro señor, déjelo en mis manos, ahora dígame el nombre de la señora

—Se llama Elora Calista Meyer

—Bien, me pongo en eso de una vez señor

Después de terminar la llamada el día en el Corporativo Ghost Blue paso lleno de trabajo y más trabajo, justo en la noche se preparó en irse Gael para la casa a cambiarse e ir a la casa de Liliana.

Salió de la gran oficina, bajo por el ascensor exclusivo de él y ya en la entrada estaba su automóvil esperándolo, se subió y manejo hasta su villa para cambiarse de ropa y manejar a casa de la familia Garret.

Cuando entro a su cuarto de baño, se quitó toda la ropa y se metió en la bañera mientras el agua fría le caía por la cabeza, cerró los ojos y pensó en la voz suave de esa mujer —Elora –dijo su nombre en un pequeño susurró, volvió abrir los ojos y termino de bañarse, al salir del cuarto de baño se propuso a vestir de forma informal, estaba colocándose el bóxer y justo su teléfono sonó con un mensaje de WhatsApp, no le dio mucha importancia y siguió vistiéndose, cuando estaba colocándose un suéter negro, volvió a sonar, este frunció las cejas y se acercó a la cama a tomarlo

Cuando abrió la aplicación salió el nombre de Elora M., era así como él la había guardado

—Hola jefe, anoche me pase un poco de tragos, así que espero no le haya dicho nada grosero, ya estoy por abordar el avión para Italia, estaré llegando en la madrugada, así que espero conocernos mañana

—¿Jefecito no está ahí? No me diga que le dije algo grosero y ahora perdí el trabajo sin antes iniciar

Mientras Gael leía los mensajes curiosos y graciosos de esa pequeña, esbozo una brillante sonrisa.