Capítulo 1 - El encuentro (II)
Nisha.
Dios, como siempre tengo que darme prisa para no perder el autobús, que me llevara a mi trabajo, me quede dormida una vez más, corro por la acera, tratando de llegar a tiempo, sonrió al notar que apenas en ese momento el autobús esta estacionando.
Me detengo de golpe, para poder dejar pasar un auto en el cruce y echo a correr una vez más, en cuanto llego a la parada, me coloco detrás de una anciana que bueno camina más lento que una tortuga, me disculpo y subo antes que ella, hasta el final de la unidad, en la radio suena alguna canción latina de moda, pero el chofer comienza a cambiar la estación, no le prestó atención, hasta que da con una emisora de noticias.
— …se presume que hay alrededor de 15 cuerpos, tiroteados, solo un sobreviviente con heridas de balas en ambas piernas, no ha querido dar declaraciones, pero se presume que este horrible episodio se debe a un enfrentamiento entre organizaciones mafiosas, ya es la tercera vez en los últimos 4 meses, con muchas similitudes, ataques armados en caravanas a un objetivo que aún desconocemos…— la periodista continua y me centro en sus palabras.
>>Pero por la insistencia debemos presumir que no ha sido alcanzado, las autoridades están buscando posibles culpables pero hasta el momento no hay una pista clara de los asuntos que llevan a estas organizaciones a montar estos escenarios y generar tanta muerte, en zonas residenciales como esta, se ha hecho una experticia en los alrededores pero nada ha salido a la luz, un posible ajuste de cuentas fueron las declaraciones dadas por un agente de la policía local.
Un escalofrió recorre mi cuerpo, al escuchar la noticia, el recuerdo de Max llega a mi cabeza nublando mis pensamientos, suspiro tratando de olvidarme de eso, pero vamos como olvidas que tu hermano menor fue alcanzado por una bala en uno de esos enfrentamientos que ocurren de la nada cuando estas supuestas organizaciones se cruzan.
Así es, tengo dos hermanos, bueno tenia, Max murió asesinado hace cuatro años, estaba en el momento equivocado en el lugar equivocado. Suspiro ya que mi día había empezado relativamente bien, si olvidamos el detalle de que me quede dormida, todo parecía perfecto, hasta que esa noticia nublo mi buen humor.
El resto del camino permanezco recordando a los gemelos, mis hermanos, como eran y lo genial que era estar con ellos, suspiro, Mou ahora está en la universidad y se esfuerza muchísimo por ser alguien, yo por otro lado tuve que dejar mis estudios para trabajar, espero poder reanudarlos el próximo año, veo por la ventana y ya estoy cerca de mi empleo, pido la parada y me bajo, suspiro al sentir la brisa chocar contra mi piel y echo andar hacia el restaurante elegante en el que trabajo, este empleo ha sido uno de los mejores empleos que he conseguido, la paga es muy buena y el horario no es tan matador.
Camino por el callejón que da a la puerta de atrás, a la de los empleados y tiro de ella, paso y me topo con Michael, uno de mis compañeros de trabajo
— Nisha llegas tarde, Pit está buscándote hay una cena importarte esta noche date prisa — dice pasando por mi lado acomodando su corbata.
— Hola Mike, de acuerdo gracias por avisarme.
Le digo sonriendo, asiento y paso por su lado para tomar mi delantal negro y colocarlo sobre mi impecable uniforme. Camino hacia la habitación contigua a la cocina y doy un par de golpes sobre la puerta, escucho la voz de Pit al otro lado
— Adelante —paso con timidez y consigo a mi jefe sentado detrás de un enorme escritorio con una lista de pedidos en la mano — oh Nisha llegaste, necesito que arregles la sala VIP, tendremos una cena importante esta noche, serás la anfitriona…— dice al verme, pero rápidamente se fija nuevamente en la lista.
— Hola Pit, está bien ¿es gente importante?…— veo como su cuerpo se tensa ligeramente y asiente.
— Mucho, así que por favor hazlo tan genial como siempre…— asiento y salgo de la oficina.
Camino al interior del elegante restaurante que apenas si tiene algunas mesas ocupadas, me dirijo hacia la sala VIP y entro, ya han comenzado con los preparativos, así que solo debo supervisar algunas cosas, después de un rato tenemos todo listo, Pit se acerca a mí y lo noto tenso y nervioso.
— ¿Que pasa Pit?...— le pregunto, porque es raro verlo de esa manera, se caracteriza por ser un tipo alegre, divertido y muy relajado.
— Es gente importante quiero que todo salga bien…— dice, mirando en todas direcciones, mira su reloj y susurra — deben estar por llegar Nisha, asegúrate que los hagan pasar inmediatamente —asiento y sonrió, pongo una mano sobre su hombro para reconfortarlo.
— Tranquilo, todo saldrá bien — el asiente y susurra.
— Eso espero —andando hacia el interior de la cocina para hablar con el chef.
En ese momento veo como un hombre sumamente atractivo se acerca a la entrada, lleva un traje oscuro y porta ese aire de importancia que pocas veces se ve, me acerco hasta la puerta y me dirijo a él, sabiendo que este es el cliente por el que Pit esta tan nervioso.
— Buenas noches, bienvenido su mesa le espera…— le digo haciéndole señas para que pase.
Nuestros ojos se encuentras por un momento y debo reconocerlo. No solo es guapo, es jodidamente sexy, sus ojos son claros, sus labios son carnosos y rosados y lleva una barba incipiente que le queda de lujo, su cabello va muy bien peinado, de seguro es alguien del gobierno, en cuanto me ve sonríe, wow, su sonrisa, en serio este hombre tiene todo lo que se necesita para dejar a cualquier mujer babeando, justo como me encuentro en este momento, el me ve un momento y comenta divertido.
— ¿Por dónde? — despierto del pequeño trance en que me ha dejado su aspecto.
Le guio por el interior, entramos a la sala VIP, le muestro la mesa, el asiente aprobando todo a su alrededor y comenta.
— Bonito lugar — me ve un segundo y luego toma asiento.
— Gracias señor — le digo, el me ve un momento y niega con la cabeza.
— Griffin nena — lo veo extrañada.
— ¿Disculpe? — el vuelve a sonreír y responde.
— Nada de señor, mi nombre es Griffin puedes llamarme así — me sorprende su pedido, pero me niego.
— Lo siento señor, pero no puedo llamarle de esa manera — él sonríe ampliamente y me cuestiona.
— ¿Te meterás en problemas con tu jefe si lo haces? — niego, porque estoy segura que Pit no tendría problemas.
Pero siento que lo correcto es que no le llame por su nombre, la continua.
— ¿Entonces qué es? — pregunta, suspiro y le respondo.
—Creo que no debería llamarlo por su nombre solo soy su anfitriona — el recorre mi cuerpo con detenimiento haciendo que me sonroje y me pregunta.
— ¿Cuál es tu nombre? — dudo un momento antes de contestarle.
— Me llamo Nisha — el asiente y susurra.
— Nisha — susurra probando mi nombre en sus labios que la verdad suena tentador — bien Nisha, creo que no sabes quién soy, pero te recomiendo que obedezcas cuando te doy una orden y te he dicho que me llames por mi nombre, es decir Griffin — su tono amable ha desaparecido por completo.
Esta vez es autoritario e intimidante, amenazante y peligroso, un escalofrió recorre mi cuerpo, asiento lentamente y le respondo.
—De acuerdo, Griffin — el asiente y vuelve a sonreír, vuelve a contemplar mi cuerpo y humedece sus labios y me ordena.
— Tráeme una botella de vino blanco por favor, mi acompañante llegara en cualquier momento — asiento y me retiro sintiéndome nerviosa.
¿Quién rayos es este hombre? salgo sin mirar atrás en ese momento tropiezo con Mike que mira la sala VIP con el ceño fruncido, le pregunto rápidamente.
— ¿Qué ocurre? — el me ve un momento y comenta algo alarmado.
— ¿Tienes idea de quién es? — me señala a mis espaldas.
— No, ¿por qué?...— el suspira y niega
— Mejor que no lo sepas, cuando se vaya te diré quién es — se aparta de mi dejándome confundida un poco más nerviosa que antes.
Camino hacia el interior de la cocina y me topo con Pit que camina de un lado a otro, en cuanto me ve se acerca a mí y pregunta.
— ¿Ya llego? — asiento y el suspira nervioso — bien, ¿cómo va todo? — pregunta.
— Me ha pedido una botella de vino — comento, omitiendo por completo el pedido de llamarlo por su nombre.
— Bien cualquier cosa que pida, lo que sea, se lo das ¿de acuerdo? — asiento y Pit se retira hasta su despacho.
Tomo una de las botellas de vino blanco que está reservada para la sala VIP y, tomo el hielo y vuelvo a salir de la cocina, entro una vez más en la sala y Griffin me mira serio, devorándome con los ojos, debo decir que con este uniforme las curvas de mi cuerpo se notan bastante, sonrió cuando le sirvo una copa y en silencio se la lleva a los labios da un sorbo y asiente.
— Gracias.
Susurra aun mirándome, asiento y salgo enseguida, por alguna razón él me pone nerviosa, él y su porte elegante e imponen, es intimidante hasta cierto punto, además toda la actitud extraña de Pit. Al cabo de un rato regreso hasta la sala para saber si no se le ofrece nada más, cuando entro está hablando por teléfono.
— Sí, está bien hermosa — hace una pausa mirándome y llevándose la copa de vino a los labios, da un sorbo y continua — genial, no te preocupes, me hare cargo aquí te espero — dice finalizando la llamada, me observa un momento y dice— mi acompañante demorara un poco más — asiento y cuando estoy por salir me detiene.
— ¿Nisha? — Me giro lentamente y susurra — ¿Acaso sabes quién soy? hace una pausa observándome con detenimiento — o mejor aún, ¿quién es el dueño de este lugar? — lo veo extrañada, frunzo el ceño y respondo.
— Sí, lo se — él sonríe de lado y pregunta con sorna.
— ¿Estas segura? — esta vez dudo un momento y le respondo.
— ¿Pit? — su sonrisa se hace más amplia.
— Pregúntale quien es Dark, dile que lo llame y le informe que estoy aquí por favor —desvía su mirada a la copa y continua— por cierto excelente elección de vino — asiento y le pregunto.
— ¿Alguna otra cosa señor, digo Griffin? — el me ve sonríe y responde con picardía.
— No, por el momento estoy bien — asiento y salgo aún más nerviosa que cuando entre.
Camino hasta la cocina y entro al despacho, donde Pit tiene otra lista de pedidos en la mano.
— ¿Qué pasa Nisha? —pregunta en cuanto ve mi cara.
— ¿Quién es Dark? — pregunto, lo que pasa a continuación me alarma.
La lista cae de sus manos y el color en su rostro se esfuma por completo, abre los ojos como platos y dice en apenas un susurro.
— ¿Dónde has escuchado ese nombre? — dudo un momento.
— Griffin me lo ha dicho —sus ojos se abren aún más, si es que eso es posible y me responde.
— ¿Cómo le has dicho? — dudo un momento y le respondo
— ¿Griffin? — el parpadea perplejo.
— ¿qué te ha dicho?...-
No entiendo la reacción ni nada de lo que está pasando pero no demoro mucho en responder.
— Que quería que lo llamaras — digo haciendo una pausa y continuo— al tal Dark y que le dijeras que estaba aquí — pensé que su rostro había perdido todo el color cuando mencione el nombre.
Pero después de esto es claro que esta por desmayarse, sin decir nada levanta el auricular del teléfono sobre la mesa y marca una tecla, es un número directo
— Buenas noches — dice en apenas un susurro — señor, Griffin está aquí y me pidió que lo llamara — después de un momento finaliza la llamada y me ve con terror, se levanta.
— Dile a todo el personal que debemos apurarnos con los pedidos, no aceptes la entrada de nadie más y si es posible apura a los comensales — hace una pausa y prosigue— no, diles que hay una fuga de gas y que deben irse— su reacción me pone aún más en alerta y le espeto nerviosa
— Pit, ¿qué sucede? — el me ve nervioso y responde.
— Es una reunión entre los grandes mientras menos personas haya aquí mejor te lo encargo, ahora vete…- dice fijando sus ojos sobre la mesa.
Suspiro y sin comprender nada salgo de la oficina, alcanzo a Mike que está entrando con un pedido y le cuento rápidamente lo que está pasando, su reacción es igual a la de Pit, cosa que me alarma aún más, se gira hacia el personal en la cocina y grita.
— ¡SEÑORES DARK VENDRA, ARREGLEN TODO! — la reacción en todos es similar a la de Pit.
Pálidos rostros se miran entre sí para luego reaccionar y comenzar a trabajar de manera rápida y nerviosa, Mike se gira hacia a mí y susurra.
— Linda ayúdame con esto ¿qué te dijo Pit, fuga de gas? — asiento sorprendida y el responde.
— Bien, hagamos esto y roguemos porque esta noche no termine con una carnicería — se gira y sale de la cocina dejándome confundida y perpleja.