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DAMIÁN
En cuanto vine a la casa pude observar que el primo de Margaret estaba presente y éstas no serán buenas noticias pues la última vez que tuvo en cuatro con ellos fue bastante pero con soso por la forma en que él se expresó y definitivamente yo no estaba de acuerdo a tolerar su presencia en mi casa tampoco sabía qué era lo que estaba buscando pero ese tipo toda la vida había sido muy interesado y creo que eso es lo que andaba buscando de Margaret porque otra cosa no creo que tendría interés.
—¿ me puedes explicar qué es lo que está pasando acá?— llegué y traté de poner el orden porque yo era el dueño de la casa y nada se podía hacer acá señora por mí tenía que dejarle en claro muchas cosas a ellos y por supuesto tendría que defender a Margaret de cualquier persona sin importar que ellos fueran familia.
—Mucho gusto joven— estrecho mi mano sin embargo yo no tenía ganas ni de tocar su mano para mí eran personas muy interesadas y de mala fama así que ni siquiera le dirigí la palabra lo que más me importaba era la estabilidad de Margaret pues desde que llegué pude notar que su cara estaba bastante seria y no era para menos este sujeto hace unos cuantos días lo había tratado como una basura y la vida hecho sentir muy mal no me importaba que era su primo pero sin duda tenía malas intenciones.
—No sé qué están haciendo acá pero no es bueno que vengan ahora si entren a mi casa menos sin mi permiso Margaret que estaba viéndonos todavía y ni si quiera había opinado algo pero puede ver como sus manos cuñada en símbolo descontento lo más probable es que tenía que sacarlos de acá.
—Por favor también esas grosero con las visitas mi madre se estaba metiendo como siempre a las cosas que yo estaba empezando a detestar de mi madre y es que ella estaba pendiente de todas las cosas que se llevan acabo y eso es algo que me está empezando a cansar tenía que dejarle muy claro las cosas al contrario seguiría en el mismo plano y lo menos que quería es que interrumpiera cuando yo hablara.
—No es eso mi amor lo que pasa es que este señor hace unos días estuvo tratando a Margaret cómo se le antojaba pero ahora resulta que viene acá y quiere lavarse las manos las cosas no son así y menos en este lugar en donde yo pongo las reglas.
—Quiero que se vayan en este mismo instante— Margaret por fin había hablado— iba a correr porque no eran bienvenidos forma no sé qué es lo que quieren pero yo no quiero ni siquiera verlos por favor Daniel llama a tus hombres y que se vayan, Desde que vinieron su presencia dame lo mejor es que en este mismo instante y siquiera quiero ver los bárbaros se había exaltado demasiado y no era para menos creo que ellos le están haciendo Mario único que podía hacer ese momento era correos pero desafortunadamente mi madre siempre se estaba poniendo y ella tenía la idea de que pasar en adelante a comer.
—Por favor Danyana no seas grosero con las personas esperemos a ver qué dicen y esa forma determinaremos ellos se pueden quedar más tiempo o se van de inmediato— una vez más mi madre se estaba metiendo en asuntos que no le convenía y no le decía nada en ese momento porque estaba mi padre presente y no quería problemas de la salud al respecto porque sé que la estaba pasando mal y no podía aportar a su afectación de salud.
Después de eso lo único que me quedaba era estar la propuesta que había hecho mi madre espero que todo saliera bien al menos el tiempo que estuvieran acá no intentarán hacer sentir mal a Margaret porque si así era cuando estaba un pequeño cambio yo mismo tendría que defenderlo a capa y espada eso era una de las cosas que mí me ponía muy mal inmediatamente es que alguien se intentaron aprovechar de Margaret sabía que ella era muy buena y conocía perfectamente su corazón sus sentimientos pero era bastante fácil de manipular y creo que su primo estaba tratando de hacer eso, subimos al comedor que estaba arriba Rubí de los platos y todos nos sentamos en la mesa se sentí un aire tenso en ese momento y creo que Margaret era la que se estaba llevando la peor parte del asunto ella estaba seria y no era para menos sabía que había mucho rencor y odio su corazón así que lo único que podía hacer en ese momento era callar y observar las cosas que tenía que decir sus primos.
—Muchas gracias—dijo su primo llevándose a la boca la taza de té que le habían preparado se miraba bastante cómodo y creo que estaba agarrando mucha confianza un poco tiempo eso no me gustaba para nada especialmente en la forma que se comportaba parecía que es un sujeto despreocupado y único que le interesa ver el dinero y su esposa no que se quedaba atrás era una mujer bastante elegante pero en el fondo podía ver el interés que tenía de por medio— si no ha sido por ti creo que Margaret no nos hubiera alojado en la casa y vale más que nos ayudaste necesitamos el perdón de Margaret— me parece un poco irónico la forma en que andaba este sujeto pero me tenía que contener porque estaba mi padre presente y mi madre también y no quería hacer escándalo frente a todos y menos en este momento.
—Escúchame bien no sé qué tipo de conceptos tienes conmigo pero te quiero dejar algo en claro y es que sé perfectamente las cosas que tú me dijistes ese día y creo que ella no está muy bien como para seguirlo siendo así que la próxima vez que tú me digas algo te las verás conmigo— creo que por su expresión se sentía bastante incómodo tanto así que se levantó y creo que estaba buscando la salida mi padre insistió en que no se fuera pero ellos seguían diciendo que querían irse por mi novia ningún problema además la única perjudicada en este momento de la Margaret se sentía bastante incómoda y creo que ni siquiera tenía ánimos de cenar.
—No te preocupes Damián nosotros ya nos vamos pero le dijo queremos es que nos acepte nuevamente, además también trajeron regalos para ti lo qué pasa que con todo este tiempo no nos fue posible darte los pero en el otro momento que tengamos libre te lo haremos además queremos decirle a Margaret y cualquier cosa que ella piensa estaremos en el hotel hospedados— una de las cosas que me va a la atención en este momento era la insistencia que ellos tenían porque Margaret les hablara para mí hay algo más que eso pero obviamente ellos no me lo diría.
—Deberían de quedarse un poco más —sugirió mi padre como siempre era bastante amable y creo que llego a las personas malas o de las buenas pero gracias al cielo que ellos no aceptaron porque de lo contrario aquí cerraron dio más grande que el que ya se había armado.
—No te preocupes si Margaret se decide hablarles a ustedes yo le ayudaré pero de lo contrario no tengo porque hacerlo y si al final ustedes quieren hablar con ella bien pueden venir a la mansión perfectamente y podemos saludarlos antes que ustedes tomen el viaje a Nueva York— ambos se levantaron y se fueron hacia la salida mis hombres lo acompañaron y me sentí bastante aliviada en ese momento aunque por la mirada que me había hecho Margaret creo que estaba enojada conmigo pero yo no tenía nada que ver con lo que estaba pasando lo único que hice fue despertar como cualquier otro mis padres fueron los que aceptaron que se quedaron momento a comer pero lo bueno es que se fueron hoy en la tarde mucho tiempo.
—Necesito hablar contigo de inmediato Margaret me tomó del brazo y sabía lo que me atendiera pues ella estaba bastante enojada y creo que se les quitaría conmigo como siempre ella trataba de semana sentía mal sin embargo yo no tenía la culpa de las cosas que había pasado espero que ya esta vez me trate de comprender y no haga las cosas más difíciles de lo que ya está—Cómo es posible que tú hayas permitido que susto dejaron entrar a esas víboras no ves el daño que me han causado y todo este tiempo he hecho lloro por mis padres para mí es una falta de respeto que ellos intenten venir a esta casa no puedo creer que tú eres el líder de ese imperio que dices y al parecer tú ni siquiera puedes mandar en esta casa— cómo siempre Margaret me atacaba una y otra vez sin saber bien las cosas pero yo no podía hacer nada simplemente debía de callar pues me conocía perfectamente sabía que las enzimas horas que ya me estaban haciendo me están afectando mucho el tipo pero ella me estaba transformando en una persona la cual tenía mucho resentimiento y conforme el tiempo creo que todo iba a explotar.
—No seas así Margaret yo simplemente acepte las condiciones de mi padre y por cierto no te había dicho las cosas que tenemos acá pero la costumbre que tiene es que cuando venga una visita por más que tú la tengas de enemigo o de amigo en la ley dice que tenemos que dejarlos entrar y darles posada tú crees que en el fondo yo quería que esas personas vinieron acá muy bien las cosas que te dijeron al menos a tu primo le quedó muy claro que la próxima vez que te intente decir algo yo mismo me encargaré de él— la tomé de los hombros y tenía que hacerle saber las cosas que yo sentía en mi corazón Margaret estaba tan dura yo de tiempo que estaba tratando de ayudarla y hacerla sentir mejor pero ella no colaboraba todo parecía que más bien ella estaba tratando de agravar las cosas.
ROBERTO
Estaba tomando de los pastelitos que mi esposa había ordenado para Margaret pues hoy le tocaba una visita especialmente a ella se sentía bastante alegre y yo me sentía más contento por lo que Marcos me había dicho se lo tenía que decir pues era la mejor noticia que hagamos recibido en nuestra vida creo que a partir de ahora las cosas cambiarían en nuestra vida y sobretodo en nuestra vivienda.
—¡María María! te tengo una gran noticia y creo que te va a caer como anillo al dedo— ella estaba terminando de hacer los últimos pasteles para llevárselo a Margaret no lo vas a creer pero Marcos me acaba de decir que los primos de Margaret ya llegado la casa y eso indica una sola cosa tú sabes perfectamente que ellos son personas muy interesadas pero si están interesados en ella es porque obviamente los Monroe le dejaron toda la fortuna te imaginas lo rico que nos vamos a volver yo estaba que saltaba en una uña pero creo que Maria por su expresión estaba muy enojada y la conocía muy bien creo que ella no estaba de acuerdo con las cosas que estaban en mi cabeza.
—Como me puedes decir esas cosas Roberto definitivamente tú no cambias nada a mí no me interesa el dinero de mi hija y si llegase rica pues que suerte de ella no de nosotros pero no puedes venir acá dándome a entender que tú estás interesado en ella— Maria definitivamente era de las mujeres muy tarde y creo que a ella lo único que le interesaba era estar en esta desgraciada casa que por poco y se nos estaba cayendo para mí era bastante vergonzoso estar viviendo en estas condiciones y especialmente de esa forma creo que ya no comprendía muy bien el montón de dinero que nos caería.
—Yo no te estoy tratando de decir que estoy interesado sumido en el dinero de Margaret simplemente te estoy comentando las cosas que están pasando y parecer a nosotros en la suerte nos ha cambiado mucho sonreírlo yo sabía las cosas que tenía en mi cabeza además de malo pero una de las conversaciones que ya habíamos tenido y sabía que nos caería muy bien— además mi hija es una de las mujeres más buena y te apuesto a que si ella llega obtener todo ese dineral también se acordará de sus padres ella es muy agradecida y tú lo sabes perfectamente mujer.
—Ya te lo he dicho una y otra vez Roberto a mí no me interesa el dinero de Margaret así que por favor hazte un lado que ya necesito irme a la mansión de ellos antes que estos pasteles se enfríen— Ella había salido enojada pero creo que con el tiempo se daría cuenta perfectamente de lo que yo estaba hablando nadie se podía negar el dinero sin importar como era la persona final y al cabo tendría que aceptar todo eso.