Capítulo 4: La venganza de Leah
La castaña fue a la escuela y una risa estaba dibujada en su rostro, que a Leah le revolvía el estómago de coraje.
— Kharolan— le hablo la pelinegro su voz escondía celos.
—Holaa—le sonrió ella, era tan feliz que ni su amiga ni nadie podía quitar ese sentimiento.
—Ya no nos vemos tanto, algo ¿te molesta de mí? —preguntó falsamente. Quería que le dijera en su cara que estaba acostándose con su novio, pero lo se mordió la lengua para no soltar más de la cuenta.
—No—contesto honestamente, ya que Kharolan se encontraba en su nube de amor.
—Bueno que te parece si a fin de mes exactamente en quince días hacemos una pijamada, tú y yo como en los viejos tiempos— sonrío ya que tenía el principio de su venganza.
Kharolan intuillo algo en su voz, no quería acceder lo pensó unos segundos, pero después de tanto acepto y se fueron juntas al salón, ahí estaba Patrick que al ver a la castaña le guiño un ojo. Minutos después le sonó el celular.
•Te vez realmente hermosa, te veo en la noche•
Kharolan sonrió y ese gesto no pasó desapercibido por la pelinegro.
—¿Un nuevo chico? -—cuestiono un tanto molesta.
—Alguien especial—contesto feliz, contaba por estar de nuevo entre los brazos de Patrick, su sueño se había hecho realidad y esperaba que pudiera seguir asi sin tener repercusiones con su amistad con Leah, mientras tanto a ella esas palabras la enfurecieron y sabia que ahora mas que nunca tenia que hacer pagar a su amiga.
1 de noviembre del 2000
Leah estaba en su casa acostada en su cama con las piernas abiertas mientras recibía un oral de parte de Ian, el cual siempre se encontraba a su merced y quien le debía tanto, los gemidos invadían el cuarto, pero a la pelinegro no le importaba en lo más mínimo, su papá nunca estaba y ella podía hacer siempre lo que le diera en gana se había convertido en lo que su madre quería y odiaba.
El timbre sonó y después de unos segundos tocaron la puerta de su habitación.
— Señorita Leah lamento interrumpir el joven Patrick se encuentra abajo esperándola— se escuchó del otro lado de la puerta. Ella puso los ojos en blanco y aparto a Ian.
— Dile que ahorita bajo— grito se levantó de la cama y camino para ponerse las escasas prendas que consistían en una diminuta tanga y coloco un vestido de tirantes que apenas tapaba su trasero. —Ahorita vuelvo— miro a Ian el cual se encontraba desnudo.
Leah bajo las escaleras para encontrarse con Patrick sentado en el sillón en cuanto lo vio corrió hasta él y se sentó en sus piernas sí que el rubio pudiera reaccionar, busco su boca, pero el inmediatamente la aparto y sutilmente la quito de sus piernas, causando que el enojo de la pelinegro creciera inmediatamente.
— Tengo que hablar contigo— soltó sin dejar pasar más tiempo. Giro su rostro para quedar de frente a ella mientras la pelinegro lo veía con el ceño fruncido.
— Vas a terminar conmigo— ella por supuesto que veía venir esta decisión. — Por la perra con la que revolcaste el día de mi cumpleaños verdad— alzo la voz y se paró del sillón, Patrick se quedó callado Leah sabía que la había engañado, aunque no sabía con quien ya que su nombre no fue mencionado.
— No quiero mentirte— se sinceró, él quería hablar con la verdad, pero sin involucrar a Kharolan. — El día de tu cumpleaños te engañe— las falsas lágrimas de Leah corrían por sus mejillas. — Y lo más conveniente es que demos fin a esta relación es algo más halla de todo y quiero hacer las cosas bien— trataba de que sus palabras fueran dulces porque sabía de la inestabilidad de Leah, no quería reclamar, aunque el ya sospechaba el engaño de ella .ni quería hacerse la víctima, el venia solo hablar de su persona y terminar con la relación.
— ¿Quién es ella? — cuestiono limpiando sus lágrimas dramáticamente.
— No hay que hacer las cosas más difíciles Le, sabes que podrás contar conmigo y seré tu amigo para lo que necesites— ella negó con la cabeza.
— Yo no quiero tu lastima, ni tu falsa amistad a partir de ahora no quiero saber nada de ti y no sabes las consecuencias que tendrán tus actos— lo amenazo. — ¡Y ahora lárgate de mi casa!— sin decir nada más Patrick salió de casa, se sentía bien con él porque por fin sentía que estaba haciendo algo bien.
15 de noviembre del 2000
Las semanas pasaron logrando que Kharolan y Patrick se hicieran completamente inseparables sus noches eran de dormir juntos y algunos días la pasión se apoderaba de ellos y terminaban haciendo el amor, pero en la escuela disimulaban, todo lo hacían por Leah, Kharolan estaba esperando el momento adecuado para decirle lo de Patrick.
Kharolan llego a la clase de Ingles en donde su amiga ya estaba sentada junto a Mandy y Santana en cuanto llegaron las tres se callaron.
— Hola chicas— las saludo Kharolan mientras se sentaba un asiento atrás de Leah.
— Espero que ya tengas el permiso de tus papas, porque este fin de semana será la noche de chicas— se giró para verla de frente Kharolan se sentía atrapada, pero quería que las cosas con Leah estuvieran bien.
— Claro ya espero que sea viernes— en esto último mintió sabía que no se la pasaría nada bien en el fin de semana y más si Mandy y Santana estarían, pero haría el mayor esfuerzo para que fuera ameno.
17 de noviembre del 2000
Era la hora del almuerzo y Kharolan había decidido pasarlo con Patrick, se iban a las canchas como lo hacían de vez en cuando, era un lugar donde por la hora estaba completamente vacío y así ellos no estarían ante las miradas de algunos.
—Hoy iré con Leah— hablo Kharolan mientras Patrick le daba una mordida a sus tacos, el la miro seriamente, paso su comida y tomo agua.
—No me parece buena idea — dijo sinceramente, sabía que algo tramaba Leah la conocía y sabia hasta donde podía llegar su alcance y aún más con la amenaza que había hecho el día que termino con ella.
—No me hará nada, solo quiere pasar tiempo conmigo— le aclaro para que el borrara sus dudas, aunque ella también las tenía.
— ¿Esta segura? — Pregunto preocupado, quería estar completamente seguro de que ella lo quería hacer, porque sabía que Kharolan siempre se dejaba manipular por su amiga.
—claro —Mintió para dar por terminado el tema.
Paso el día y a la hora de la salida la castaña y la pelinegro tomaron el coche y se fueron a la cabaña donde había sido la fiesta, Kharolan sentía nervios desde que había platicado con Patrick ella presentía que el le estaba ocultando algo y también sentía algo con la actitud de Leah , unas punzadas de miedo la invadieron al llegar al lugar se volvieron más intensas y los nervios se apoderaron de todo su cuerpo, pasaron y ella se sorprendió al ver a los autos de Charly, Ian y Erick.
—¿Por qué pasa aquí Lea...? — pero antes de que pudiera terminar ella ya se encontraba en el suelo, tras recibir un golpe en la cabeza. La recogieron del suelo llevandola hasta el cuarto en donde Leah la habia escuchado junto a Patrick, para desnudarla, y aventarla en la cama, la amarraron de pies y manos dejándola expuesta. La pelinegro le tiro agua en el rostro, haciendo que la castaña se despertara sobresaltada.
Ella abrió los ojos y parpadeo varias veces, luego un dolor invadió su cabeza consecuencia del golpe que anteriormente le había dado Leah y se percató que estaba Desnuda.
— ¿Qué está pasando?, ¿Por qué me haces esto? —intentaba zafarse, pero los esfuerzos eran en vano, los tres jóvenes estaban en pantalón con el torso descubierto solo viendo desde el otro extremo del cuarto.
—Piensas que nunca me iba a enterar, tú me quitaste a Patrick, y ahora — la tomo de la barbilla y la apretó —me lo pagaras zorra — hablo para luego abofetearla varias veces más, hasta que Kharolan comenzó a llorar. Leah tiro una risa burlona. —No llorabas mientras me quitabas a mi novio zorrita —miro a Eric, Ian y Charlie —Es su turno — ella tomo la cámara que se encontraba en la mesita de noche y comenzó a grabar. Mientras los tres hombres se comenzaban a desvestir.
—No Leah por favor ¿Qué me vas a hacer? —luego miro que los tres jóvenes se empezaban a desvestir — no me hagas esto — suplico sollozando, sentía el miedo invadiendo cada par-te de su cuerpo.
—Claro que si — le sonrío con ironía —Le enseñare a Patrick lo perra que eres, es más a toda la escuela vera este vídeo y cuando veas que te acuestas con los novios de nuestras amigas todos te odiaran y veras lo puta que eres — le grito en la cara
—Nadie te creerá si estoy amarrada y gritando — se defendió mientras intentaba quitar el amarre.
—Siempre voy un paso adelante querida — caminando hasta la mochila saco una jeringa con heroína — agárrenla para que no se mueva — ordeno mientras Kharolan se movía intentando salir de el agarre pero era imposible, Ian la tomo de la muñeca y Leah sin mas la coloco en la vena de la castaña, solo bastaron unos minutos para que la droga hiciera efecto.
Ellos notaron que Kharolan no ponia absoluta resistencia y la desataron, Charly fue el primero que entro en el juego que Leah tenia preparado, se acerco a la castaña para besarla, ella sin más se dejo llevar cautiva de la heroína el recorría su cuerpo con sus manos y las posó en su trasero, por detrás llego Ian que jugueteaba con sus senos, Leah grababa todo e hizo una señal para que Eric se integrará.
La recostaron en la cama y se bajaron a su sexo metiendo su lengua en ella haciéndola gemir mientras otro jugueteaba con sus senos y el restante la besaba y metía su lengua hasta el fondo. Así intercambiaban lugares, hasta que sus miembros estaban duros, Leah les hizo la señal, y la pusieron de rodillas, uno se introdujo en su boca y la castaña como loca lo chupaba, los tres se pusieron delante de su boca y ella jugueteaba con los tres, y uno a uno descargaron en su boca.
Pero rápidamente traes el morbo volvieron a ponerse duros y uno se introdujo en su sexo y comenzó a embestirla rápidamente. Ella pedía más y Eric se apoderó de su trasero causando un quejido de la castaña, pero se solo bastaron unos segundos para que los movimientos de este lograra que el dolor se evaporara, cada uno recorrió su cuerpo haciéndola a su antojo. Dejaron a Kharolan la cual quedo totalmente dormida, Leah había disfrutado el principio de su venganza.
18 de noviembre del 2000
Era la madrugada cuando Kharolan despertó, su cabeza reventaba y su cuerpo lo sentía débil, no recordaba que había pasado estaba desnuda y llena de chupetones en el cuerpo. Eric cruzo la puerta solo en su ropa interior y se acercó con un vaso con agua.
— Pero si despertó la bella durmiente— sonrío sínicamente mientras Kharolan estaba desconcertada
—¿Que paso? — pregunto confundida —¿Porque están ustedes aquí? — se cuestionaba nerviosa, sentía su cuerpo realmente cansado.
—Leah te lo diré en un momento mientras tomas tu vaso de agua nos esperan unos buenos días— se paró le guiño un ojo y salió de la habitación. Trato de desayunar, ya que se sentía hambrienta hasta que vio cruzar a Leah con una bata de baño.
—Mi querida amiga pero si me has dejado sin palabras —sonrió Leah aplaudiendo.
—¿Que paso, que me hiciste? —cuestiono parándose de la cama.