4

La guillotina había sido descubierta, en ella estaba una navaja con un poder inigualable, de decía según el mito que esa navaja había sido sellada con lo poderes de todos los Dark que han existido desde los primeros inicios de la creación de esa dimensión, nadie era capaz de detenerla incluyendo todos los Dark presentes, la luminosa guillotina se podía observar desde cada ricon de la dimensión central, los pobladores estaban conmocionados de lo que sucedería, los justicieros estaban preparándose para vestir de luto.

Maked Wolf seguía luchando contra el único contrincante que había quedado en pie, pero al igual que los demás Max también se dio cuenta que la ejecución empezaría ya.

En el monte seguían añadiéndose otros Dark, pero no estaba todos, había un plan de parte de algunos de ellos que pronto se darían cuenta todos de lo qué sucedería.

•

ASTRID COLLEMAN

—¿Qué eso que se ve por allá?—señale un monte en donde se apreciaba una fogata muy grande, pero eso definitivamente no era una fogata común y corriente.

—seguro es la ejecución—dijo, Mike,—lo más probable es que acaba de empezar y los otros todavía estamos acá.

—si es así no hay tiempo que perder—gritaba, Kai, preocupado—yo iré al frente, ustedes pueden venir detrás de mi, de esa forma nos cuidaremos las espaldas. Después de todo seguro en el mismo lugar estará, James, por lo tanto debemos darnos prisa—salimos corriendo en conjunto, al parecer nuestros poderes habían incrementado después de los enfrentamientos que tuvimos con esos Dark.

KATSURO

El líder de todos los Dark estaba frente a mi, al parecer se  la estaba pasando bien al saber que dejaría de existir. Me sorprendía que después de todo lo que hice por ellos también lo disfrutaran como si al tal fui un enemigo desde siempre. Y eso que todo el tiempo los vi con gran admiración, ahora los miraba con repudio.

—lo único que deseo es que le permitan regresar a su mundo nativo a los chicos que han venido acá por rescatarme, ellos no tienen la culpa de todo esto, señor, a quien tienen que culpar es a mi y asumo todas las consecuencias de mis actos, no me arrepiento de haber miento bajo la guillotina, así que si usted me consediera ese deseo de lo agradecería—imploraba por James y sus amigos, porque de lo contrario jamás saldrían vivos de acá.

—De acuerdo—dijo el líder cargando con su bastón—luego que te ejecuten daré la orden a todos los Dark que les será imposible poner una sola mano en ellos, lo haré por tu buen trabajo que desempeñaste antes, no tengo la duda que has sido uno de los mejores justicieros que hemos tenido acá.

—muchas gracias por su consideración, mi señor, es la mejor noticia que he podido escuchar durante todo este tiempo—-baje la mirada resignando a morir.

Al instante dieron la orden de liberar el poder de la guillotina, esta había sido encendida por un fuego más intenso del que tenían, las ataduras que la sujetaban habían sido cortadas por medio de un ritual que realizaba el verdugo .por otro lado los demás me tomaron los brazos y piernas para llevarme al filo de la temible navaja, pero había algo en mi que me hacía sentir sin miedos. Estaba lleno de seguirías de que todo lo que había hecho antes no me arrepentía, si esta era la paga de todo la aceptaría de buena manera.

Bueno, Katsuro, todo inicio tiene su final—eche un vistazo a todos los que estaban ahí—gracias a todos los que estuvieron conmigo desde mi niñez, gracias Jinsu por todo loq he ñadamos cuando tan slll éramos unos pequeños, gracias, James, ya que por medio de ti conocí el verdadero sentido de la vida y no solo eso, contigo aprendí a aquello que ustedes los humanos le dicen amor.

Los preparativos ya habían terminado, mi cuerpo estaba esperando a ser cortado, la liberación del poder de esa navaja había terminado y con ella una transformación aún más grande, la misma navaja había tomado visa propia. Era una especie de navaja gigante en forma de una boca de un tiburón que me haría pedazos el cuerpo en solo segundos.

—la verdadera forma de la gurú llorona se ha completado—anunciaba el líder—cuando se deslice cortando la cabeza de Katsuro todo habrá terminado.—todos observaban lo luminoso y podero que se miraba eso. En algunos rostros mire unos ojos de arrepentimiento, sabía que no todos estaban a favor de lo que se estaba llevando a cabo, pero ordeneres eran órdenes.

No estoy con miedo, fui un sujeto bendecido por tantas cosas que me pasaron en poco tiempo, si estoy acá es por debí de estarlo y así mueren los valientes—esperaba que la enorme bestia cortara mi cabeza—conocí el mundo de los humanos lo cual es una gran dicha. Esto no es un castigo, esto no es sufrimiento, mi corazón no ha dejado nada atrás. Adios mis queridos amigos—cerré mis ojos, la bestia venia sobre mi.

Abrí mis ojos tiempo después ya que aún. L había pasado nada y yo pude jurar haber visto la bestia lanzarse sobre mi, pero observé a alguien que estaba encima de mi deteniendo el ataque. Ese atuendo... ese cuerpo... ese cabello... yo lo conozco, no pida ver bien por la intensidad del fuego, pero sabía que en algún lado lo había visto.

—oye—me dijo, esa voz definitivamente era de él—no es el momento de estar con ese ánimos decaído.

—¿james?—pregunté al sujeto que tenía ahí, cada vez más podía ver con claridad.

—si, soy yo, Katsuro—la visión se hizo clara—no tengas miedo, no soy tu enemigo.

—¿Cómo diste hasta acá? Sin duda eres el chico más terco que he conocido, estás parado frente a la mayoría de los Dark del palacio central, no te das cuenta que ¿esta vez te matarán? No tienes ni la más mínima idea de lo que eso representa. Si la vez anterior por poco te mata, Himura, no lo dudes que esta vez si lo hará completamente. Es mejor que te vayas, te agradezco que hayas venido hasta acá, pero prefiero que tú estés bien, yo ya estoy condenado a morir acá.

—no puede ser—dijo un Dark—lo detuvo, detuvo la guillotina, es imposible, se dice que esa guillotina está forjada con el poder de todos los Dark de todas las generaciones y el tan solo la detuvo con su espada, pero ¿Quién diablos es ese sujeto? Jamás había visto algo similiar.

La guillotina se volvía a posicionar para un segundo ataque, esta vez sería contundente y nosotros aún estábamos en el mismo lugar.

—por favor James, vete de acá por favor si lo detuviste una vez fue coincidencia, pero no creo que vuelva a hacerlo.—era ilógico que volviera a detener otro ataque de tal magnitud—¡vete ya!—insiti—en poco momento dos Dark se posicionaron con sus espadas, uno era Barclays y el otro era Rubius, ambos lanzaron hechizos a la misma vez con el fin de destruir la guillotina. Por suerte la destruyeron por completo, miles de fragmentos volaban en el aire.

—no sé qué pasa con esos dos sujetos, pero lo que acaban de hacer es una muy buena oportunidad—se colocó encima de lo que quedaba de la guillotina—estas cosas hay que aprovecharlas.

—¿pero qué demonios haces, James?—observé hacia arriba, él estaba con su espada, concentró su poder en un solo ataque pulverizando por completo toda la estructura de la guillotina. Era increíble lo que acababa de presenciar.

—siempre te la pasas reprochándome qué hago esto o qué hago lo otro, en momentos parecieras mi padre, pero vale más que no te hago caso porque de lo contrario las cosas salieran muy mal, no sé si en verdad confiabas en mi capacidad, pero te lo he dicho una y otra vez, si vine hasta acá es para rescatarte, amigo—me sostuvo encima de su hombro ya que mi cuerpo estaba debilitado, a duras penas me podía poner en pie.

—discúlpame—empecé a llorar, porque hasta hace unos momentos creí que mi vida acabaría de esta forma y ahora nuevamente tenía esperanzas. Esperanzas que sólo James había despertado—no volveré a desconfiar de tu palabra, pero ahora tengo una muy buena pregunta sabelotodo—lo volví a ver.

—¿dime?—se apoyó en su espada.

—¿Cómo se supone que vamos a irnos de acá?  Hay muchas personas acá por lo que no creo que sea fácil huir o ¿si?

—no sé si sea fácil o no, pero no pienso dejarte acá o bien podemos parearle el trasero a todos estos tipos de por si no estamos solos, sabes muy bien que mis amigos han venido hasta acá por ti también, ellos al igual que yo se han vuelto muy fuertes así que no te preocupes—su mirada cambio, era llena de seguidad y determinación—salvaré a todas estas personas y podremos escapar.

Lo observé de perfil y vi cuanta seguidad poseía en su mismo, el James que había conocido hace un tiempo atrás había quedado en el olvido, ahora era un hombre con mucho poder, lo podía sentir sin necesidad de que él lo reflejara, me alegraba por el, después de todo ese era la misión inicial, que él se volviera más fuerte.

Enseguida frente a mis ojos aparecía Jinsu, mi buen amigo, me alegraba que el aun estuviera vivo después de haber luchado contra Himura.

—Hola amigo, me da gusto verte de nuevo—lo salude con la mano.

—también me alegro por ti, Katsuro, pero vine porque no sabía si ese chico en realidad te salvaría, no podía confiar en el—sonreia.

—Katsuro—James me habló—necesito que vayas con Jinsu a un mejor lugar, déjame el resto a mi ¿ok?

—¿te has vuelto loco o que?—frunci el ceño—hay muchos acá u no creo que puedas con todos ellos. Te ayudaré a luchar—me posicione para luchar solo con mi fuerza bruta, pero caí instantáneamente, mi cuerpo era frágil. Mis poderes y mis armas no las tenia.

—¿así quieres pelear?—se reia—por favor hazme caso, vete con Jinsu, él te llevará a un lugar que ya habíamos acordado, al final de todo yo me integraré a ustedes—me tomo del brazo, nos desvanecimos y al instante aparecimos frente a Jinsu—por favor cuídalo, es tu deber y espero que no me decepciones, Jinsu—enseguida Jinsu me cargo en su espalda y empezó a correr.

JAMES

—no se queden parados como idiotas, vamos, corran tras ellos—un Dark ordenaba a sus súbditos en cuanto Katsuro y Jinsu salían del lugar—no podemos dejar que escapen con el prisionero

En seguida aparecí frente a ellos, sus caras daban el aspecto como si habían visto a un monstruo y no era para menos, estaba sediento por luchar y detruirlos uno a uno. 

—no los dejare pasar por ningún motivo—los fulmine con la mirada—si solo dan un paso prometo que les quitaré la vida, así que mejor no sigan insistiendo en la vaga idea que atraparan a mis amigos—habían cinco sujetos con sus espadas, si eran súbditos podría deducir que no eran tan fuertes—como gratitud podría vencerlos sin usar mi espada—presumí de mis habilidades.

—¿Cómo dices?—se soprendio uno de ellos—eso lo veremos—se abalanzó sobre mi con su espada

Al instante con mis podías manos tomé su espada y la destrocé y con el otro puño le di un golpe noqueándolo. Vino otro detrás de mí y con mi codo rompí su escudo traspasando su pecho.

—es imposible—dijo uno de ellos, se había paralizado cuando me vio—enseguida terminé golpeándolo y así sucesivamente con los demás.

—uno, dos, tres, cuatro, cinco—enumeré sus cuerpos vencidos en el suelo—veo que no hay nadie más—escuche alguien que se aproximaba a gran velocidad, esta vez era alguien fuerte así que tomé mi espada y me defendí—vaya vaya... se trata de ti, Himura,—forcejeábamos