De pobre a Rico
La mansión quedaba a las afueras de la ciudad, el lugar era inmenso.
—Bienvenido a la mansión Spirit— dijo el chófer.
—¿Esta mansión es de mi padre?
—Asi es, hizo grandes inversiones en el negoy del petróleo y eso le llevo a ganar grandes sumas de dinero, después de su muerte, la administración de sus negocios fue tomada por su socio más cercano el Sr. Smiths a disposición de su padre.
— ¿A cuánto asciende la fortuna de mi padre?
—Mil millones de dólares.
—Si que era grande.
—Sigame por favor, le fuiste por la mansión.
Entraron a la mansión y todos los sirvientes estaban en la sala, esperando su llegada.
Abren la puerta y sale el mayordomo.
—Buenas tardes Amo James, mi nombre es Carlos y soy el mayordomo de la mansión y este es todo el personal.
—Relajense, no estaré por mucho tiempo, creo que mañana saldré de viaje nuevamente— volteando hacia donde estaba Gabriel.
—Quiero notificarle que el Sr Smiths llamó indicando vendría esta misma noche para honrar su llegada.
— ¿Como sabe que llegué?
—La llamada que realizó el Joven Gabriel fue al Sr. Smiths.
—Entiendo, bueno aprovechando que estoy aquí, quisiera que nos preparen algo de comer.
—Por supuesto, nuestros cocineros prepararán lo que solicité.
—Por favor nada extravagante.
Gabriel y yo nos fuimos hacia el salón principal.
— ¿Que más no me has dicho? ¿Porque todos hablan de salvar al reino, si al momento no ví ningún peligro.
—Al igual que tú, yo también desconozco muchas cosas, pero de eso se encargará el Sr. Smiths en explicarte, lo único que yo se, es que tú enemigo real es Blue-Shadow, está preso en un prisión mística, pero en 3 meses se liberará.
— ¿Blue-Shadow? No parece tan agresivo.
—Si que lo es, según me dijo tu padre, Blue-Shadow obtuvo magia oscura, aumentando su fuerza drásticamente y al ser de raza guerrera, pudo aniquilar a muchos lobos sin tantas dificultades, también obtuvo fanáticos que hacían parte del trabajo sucio pero no son tan fuertes como él.
En eso le avisaron que ya estaba servida la comida, los llevaron al gran comedor donde había capacidad para 40 personas.
—Y es que acaso comía un ejército aquí.
—De la vida de tu padre conozco poco, mi objetivo eras tú, no él.
En el comedor habían distintos tipos de carnesz mariscos entre otros.
—Creo que han contado mal, solo somos dos, no 50 personas.
—Se sirve de esa manera para que sea el Joven quien escoja lo que más le apetece— indico uno de los sirvientes.
—Y ¿Que se supone harán con él resto?
—La comida que el Joven o sus acompañantes no consuman, se les brinda al personal, de esta manera los desperdicios son mínimos.
—Entonces ¿Ustedes siempre tienen que esperar a que yo terminé de comer, para luego comer ustedes?
—Exactamente, pero no siempre pasa de esa manera, en todo caso, cuándo el Joven no coma aquí al personal se les da algo más sencillo.
—Cambiaremos esto, en la próxima que yo venga
solo me dirán las opciones y yo les diré que comeré, de esa manera el personal no tendrá que esperar a que yo terminé.
—Entendido.
El sirviente se retira y ellos empiezan a comer, cuando terminaron el platillo fuerte, se acerca nuevamente el sirviente.
— ¿Fue de su agrado la comida?
—Es lo mejor que he comido.
— ¿Desea algún postre?
—¿Postre?
—Contamos con distintos tipos de postres, desde helados hasta Tartas.
—Un helado de limón por favor.
—Y ¿Para usted Joven Gabriel?
—Tarta de manzana, siempre me han gustado.
— ¿Has comido antes aquí?
—Aqui no, pero tú padre nos llevaba, recuerdas las veces que te regalaba una rebanada.
—Si.
—Pues, era tu padre quien me las daba, decía que las preparaban en su casa, lo que nunca me dijo es que era una mansión.
—Vaya, me sorprende.
En eso entra el mayordomo.
—Disculpe por interrumpir, el Sr. Smiths lo esta esperando en el salón principal.
—Solo terminamos de disfrutar el postre y voy para allá.
—Esta bien, le pediré que aguarde un momento.
Se retira el mayordomo.
— ¿Conoces al Sr. Smiths?
—No, tu padre me dió un número a memorizar, sabía que en algún momento tu volverías y de no instrucciones, yo solo tenía que llamar a ese número y dar mi ubicación.
—Entiendo, vayamos entonces a ver qué dirá.
Ambos se levantaron del comedor y se dirigieron al salón.
Al momento de entrar el Sr. Smiths pone su taza de té y se levanta de su asiento.
—Es un placer verlos nuevamente a los dos.
— ¿Nos conoces?
—Claro que los conozco Alfa Supremo Red-Spirit y Guardián Star-light, mi nombre aquí es Brayan Smiths pero en el reino de Anjosec mi nombre es Hechicero Robin.
— ¿Anjosec? — dijeron ambos.
—El reino de Canagua es él reino de los lobos, el reino de Anjosec es un reino de humanos, y así existen otros reinos, cuando nuestras tierras se vieron afectadas por la destrucción que provocó Blue-Shadow, hicimos un acuerdo ambos reinos, fue en esa ocasión que las manadas sobrevivientes escogieron a un Alfa supremo por primera vez y por la bondad que había en tu padre fue escogido.
—Pero el alfa que nosotros vimos dijo que después de la guerra con Blue-Shadow, hubo una pos-guerra.
—Es la ambición del poder lo que desatan las guerras, por eso tu deber es retomar el liderazgo que tuvo tu padre en el reino de los lobos, para luego dirigir al ejército de los humanos y derrotar a Blue-Shadow.
— ¿Tú irás conmigo?
—No, mi misión es dirigir lo que tú padre construyó aquí, además aquí no tengo que estar velando por mi vida constantemente.