Librería
Español

Mi pequeña paula

60.0K · Completado
MCJAY
46
Capítulos
780
Leídos
9.0
Calificaciones

Sinopsis

Una joven dama a la cual su madre trata como sirvienta. Un poderoso empresario que necesita una esposa. Una esposa como ella.

Matimonio por ContratoAmor a primera vista CastigoPoderosoDramaProhibido

Capitulo1

Me levante temprano para hacer mi tarea como siempre, es interesante como pasé de ser una dama que acababa de ser presentada en sociedad a una empleada doméstica en mi casa, durante 3 años mis padres dejaron de tratarme como una hija y más como alguien de su servidumbre.

—Paula (Mariana pig) Necesito que me laves los vestidos inmediatamente.

—Y tengo que arreglar todas mis joyas, mañana es el baile con los Empresarios de New York y tenemos que lucir hermosas—, dijo Martha.

—Está bien, Mariana y Martha, lo haré en un momento.

Si no lo haces rápido, le diremos a mamá que te castigue (me dijeron ambas al unísono).

Después de 3 horas terminé la tarea que mis hermanas me pidieron que hiciera.

—Madre (habla sutilmente) Ya he terminado toda mi tarea hoy, ¿me permites ir al baile que darán los Empresarios de New York mañana?

—De ninguna manera, tienes muchos deberes que hacer, aún necesitas limpiar los platos, las ventanas, sacudir las alfombras y las cortinas, además de arreglar nuestros vestidos.

Pero mamá, soy una señora inglesa, no cree que deba ir más seguido a los bailes.

Sí, pero no tienes ningún vestido para combinar y tus hermanas no tienen vestidos de tu talla, no puedes ir así y hacer que todos los nobles hablen mal de nosotros—.

—Está bien madre, lo siento, lo ordené, volveré a mi habitación—.

Espero que no vuelva a ocurrir, hasta mañana.

Hola Paula. ¿Cómo has estado? Lamento no haber venido a visitarte antes, tuve que ir a una cacería por varios días y apenas llegué.

—Vale Keyla, y como te lo has pasado bien?

—No muy bien, es aburrido cotillear con las otras damas mientras los caballeros solo venían a comer por la tarde.

Aparentemente fue aburrido.

Sí, si tan solo te dieran permiso para ir más a los bailes conmigo.

Sabes que no es fácil convencer a mi madre para que me permita salir de casa.

Lo sé, solo te deja salir para cuidar de tus hermanas que están en la cinta.

Si, y dentro de poco tendré que ir a cuidarlos, creo que será la próxima semana.

Eso es bueno, para que puedas ser mi invitado de honor en un baile organizado por mis padres.

—¿En realidad?— No he asistido a un baile en mucho tiempo.

Sí, la última vez fue en la boda de tus hermanas hace un año.

Lo sé, mi madre no me deja salir a muchos lugares.

Tal vez sea porque no te trata como a una hija, sino como parte de su servicio.

No digas eso Keyla, me gusta ayudar en el trabajo y convivir con los trabajadores.

Sí, pero se ha aprovechado de tu amabilidad e incluso te ha sacado de tu dormitorio.

Martha ya no quería dormir en la misma habitación que Mariana y me pidió que le diera la mía.

Sí, tus hermanas son las que más se aprovechan de ti y te tienen como dama de honor.

Martha acaba de ser presentada en sociedad y quería que la ayudara.

—Está bien, me tengo que ir, mi madre me está esperando para tomar el té con sus amigos y sus respectivas hijas—.

Bueno, espero verte pronto.

Por supuesto Paula, cuando vas a visitar a tus hermanas.

Paula, querida hermana, ¿cómo has estado?

Bueno, y tú Daniela, ¿cómo te sientes con tu embarazo?

—Feliz, estoy muy feliz, aunque a veces me canso, el bebé está muy grande—.

Tal vez sean dos bebés, ¿no crees?

Eso sería maravilloso, si es así, entonces Michelle también tendrá dos bebés, su barriga es tan voluminosa como la mía.

Es una noticia maravillosa.

Hermana, espero estar aquí cuando den a luz.

Sra. Bradford, la Srta. Anlwick las está buscando a usted ya su hermana.

Por supuesto, hazlo y sirve el té, por favor.

Sí, señora.

Buenos días Lady Daniela, buenos días Paula.

Buenos días Esther, es un gusto que vengas a visitarnos.

Paula me envió una carta diciendo que vendría hoy.

¡¡Vaya!! Entiendo, supongo que vienes a dar un paseo con mi hermana y hablar.

—Solo si me lo permites, y además vengo a pedirte permiso para que Paula asista al baile que darán mis padres el viernes.

—Claro Keyla — Paula, tienes mi permiso.

Gracias hermana.

Bueno, los dejo para que den un paseo por el jardín un momento.

Gracias señora Bradford.

¿Qué haces por aquí, Keyla?

—Sabes, estoy aquí para llevarte a todos los bailes de esta temporada, en especial al que mi familia dará muy pronto.

Sabes que no puedo salir de la casa de mi hermana, mi madre me mataría.

—Lo sé, te pondría a hacer el trabajo de toda la mansión sin la ayuda de los sirvientes, pero ¿no crees que vale la pena?

— No Keyla, será mejor que no insistas en que no podré asistir a los bailes.

¿Cuanto tiempo estarás aquí?

—Hasta que Daniela dé a luz, me quedaré para ayudarla en todo lo que necesite.

—Algo así como su escolta, no creo que le moleste que vayas a los bailes conmigo y mi familia—.

Tal vez no, pero sabes que ni siquiera tengo un vestido para asistir.

Así que no te preocupes, solo pídele permiso a tu hermana y yo me encargo del resto.

Muy bien, Keyla, vamos a preguntarte.

No sé cómo lograste convencer a Daniela, pero me alegro de que lo hayas hecho.

Lo sé y lo mejor es que te quedarás en mi casa hasta el baile que darán mis padres.

Gracias Esther.