Prólogo

-Te he estado esperando, anda sube.

-No gracias señor, es usted muy amable, pero debo ir a casa y prefiero tomar el autobús.

-Te dije que subieras. – ordeno Brett, y sujetándola de un brazo la jalo, al Sonia resistirse, le dio una bofetada, y por la fuerza la obligo a subir al auto.

Mientras dentro del auto Brett amenazaba a Sonia diciendo:

-no vayas a gritar, yo solo quiero estar un rato contigo.

-Pero señor, yo tengo que llegar a mi casa, mis padres estarán preocupados. – dijo asustada.

-no lo creo, una chica que trabaja de noche no puede preocuparles a sus padres. – dijo riendo sarcásticamente.

Brett condujo por la ciudad dirigiéndose a una parte alejada y sola, donde se encontraban unas construcciones abandonadas. Cuando se bajó del auto, con lujo de fuerza sacó a Sonia del auto, mientras le decía.

-A mi ninguna mujerzuela me rechaza.

-Señor, usted se equivoca, por favor suélteme. - Suplicaba llorando, mientras la jalaba haciéndola entrar en una de las construcciones.

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espero que esta novela sea de su agrado, es solo eso, no pretendo ofender a nadie, ni minimizar el trauma de una victima, solo trato de mostrar que el undo sigue y que con un poco de esfuerzo y ayuda las victimas pueden salir adelante.