Celos

Después de que se fuera Felipe con su gente, el pelinegro sale detrás de ellos, pero dirección al norte camina por la ciudad pensando en los cuerpos que instantes atrás había visto y revisado, al llegar a las afueras de la ciudad, estira piernas, brazos, alza la mirada buscando la luna que por el momento se encontraba oculta por nubes traviesas, da un pequeño salto empieza a trotar, cien kilómetros después su trote cambia a paso veloz. Horas más tarde llega a la hacienda en Aldama, Chihuahua, cual gato con pantuflas entra y sale sin ser visto aun que sus hijos le pudieron oler para cuando Calix reacciona ya estaba de vuelta en camino al estado vecino, llegando a la casa de su hermano hasta el día siguiente por la tarde, ya que hizo paradas técnicas por la sierra madre occidental.

     Había olvidado las llaves de esa casa, toca el timbre, tremenda sorpresa se llevó cuando la que abre es Secundina quien había ido no por voluntad propia sin no por petición de sus amigos a visita social a Darío, verdad es que se sorprendió de verla cuando le había dicho que no fuera, eso le molesto un poco pero tampoco podía negar que le alegró el momento, también estaba ya su hija Briseida.  

_¡He! ¡Hola! – le saluda de abrazo y beso- _Pasa, pasa, los demás están en la cocina, incluso tu hija, es muy bonita.

_ Gracias por lo de mi hija. Si mal no recuerdo no deberías estar aquí ¿Qué haces aquí? - pregunta con un toque de molestia- 

_¿Hm? Yo no quería venir, de hecho, ya no tardan en llegar por mí, solo que Paty, Isabel, Edgar y Ernesto insistieron que no me podía negar.

- Aun en el umbral de la puerta- _Van a venir por ti ¿Quién?

_Fernando -suelta sin importancia- 

- Su buen humor se va por la coladera, su cuerpo se tensa, las ganas de golpear algo aparecen- _“Tu amigo” ¿Aquel que vi en tu casa?

_Si ese mismo, no te preocupes no va a llegar a esta casa, cuando esté a una cuadra me va a avisar. ¿Elián? 

_¿Si? – aun con molestia en su voz-

_Deberías cambiarte de ropa –hace una mueca, suena el celular, atiende” ya llegué” - _¡Ya me voy! – va a la cocina- _¡Chicos ! Ya me voy.

_¿Qué? ¿Por qué? 

_Ya les había dicho que iba a salir, después los veo ¿De acuerdo? 

_Te vas por que gustas.

_Nos vemos, pásala bien – se despide de todos, cruza la casa para ir a la salida en la puerta parado militarmente estaba Elián- _Nos vemos después pasa buenas noches, oye, por cierto ¿Cuánto mides?

_Te encamino – le abre la puerta- _uno noventa y seis.

_ No, no así está bien, yo ya me voy sola- se despide de abrazo y beso, pero Elián la presiona contra él, sin soltarla-_Oye… me sueltas…

_Dije que te encamino y te encamino.

_Pues si no me sueltas como quieres que camine – suena de nuevo el celular, abre el mensaje “apura el paso, ya te quiero dar hasta por el culo” Elián también lee el mensaje no puede evitar gruñir- _¡jajaja! Elián, por favor suéltame – pasa la lengua mojando los labios, eso hace que el mayor no la deje salir de su abrazo, se remueve del abrazo de Elián “ya voy” - 

_-El griego la abraza se inclina lo suficiente para hablarle al oído -_ Quédate con nosotros, prometo hacer que pases un agradable momento a mi  lado incluso mejor que ese tal Fernando.

_ - Secundina siente una corriente eléctrica recorrer todos su cuerpo, Elián puede sentir la oleada de sensaciones que la hizo sentir -_ De…debo irme - sale del agarre de Elián, casi corriendo sale de la casa el griego detrás de ella- 

     Salen los dos, al finalizar la cuadra están un carro gris, enciende varias veces las luces llamando la atención de los dos ella reconoce perfectamente, hace por despedirse de nuevo de su acompañante sin éxito alguno, Fernando baja del auto, saluda a lo lejos, ella regresa el saludo, quiere apurar el paso, pero el pelinegro se lo impide, por lo contrario, va más calmado, estudiando al rubio. 

_Buenas noches, Fernando.

_Hola Secu, buenas noches – es él quien la saluda-

_Los presento Elián- Fernando, Fernando- Elián –de cara a cara siendo el pelinegro quien le saca unos pocos centímetros al rubio Fernando extiende la mano para saludar, Elián está más que serio, se obliga a saludar, el aprieta con fuerza la mano de Fernando eso no le extraña al rubio-

_ ¿Tú eres el nuevo jefe? 

_ ¿Y tú el amigo? 

_ Si, lo soy - dicen al mismo tiempo, Secundina frunce el entrecejo extrañada- ¿Algún problema? - es Elián- quien habla a lo último- 

_No, por el contrario. De hecho, le dije que firmara.

_ ¿Qué?

_- La ve, ladea la cabeza, ella sube al automóvil- _Por lo que se, va a ser tu asistente personal, bien, sé que en esos puestos se llega a cruzar la línea, se llega a tener cierta familiaridad inclusive intimidad.

_ Créeme no mezclo el placer con el trabajo y menos con ella, que solo la conozco por mi hermano.

_ ¿Darío? Para mí que esos dos son amantes.

_ ¿Por qué lo dices?

_ Que te diga tú hermano…como sea solo diré algo, mi amiga es algo complicada, nunca espera nada bueno de nadie ni de ella misma, no se tiene nada de confianza, así que por favor tenle mucha paciencia.

_Parece que la conoces muy bien. 

_Me gusta presumir que sí. – se despide de él, entra al auto, Elián no puede evitar cerrar los puños con fuerza al ver que se él la besa en los labios, pone el auto en marcha, él está por emprender la marcha para perseguirlos, pero es detenido por un fuerte abrazo-

_ Suéltame. – dice tan serio que a Darío le da miedo- 

_No, sé que te duele hasta el alma, pero debes concentrarte, en cuatro noches vas de cacería…

_Se va a revolcar con ese – suelta enojado- 

_Si y no puedes hacer nada por el momento, así que tranquilo.

_¡Lo quiero matar!

_ También yo, pero no lo puedes hacer y ni lo vas a hacer ¿entendiste? No me hagas levantar mi mano en tu contra ¿Entendiste? Pregunte ¿Entendiste? 

_Lo hice, ahora dime tu relación con ella -molesto-

_ Es mi amiga, ya te lo había dicho.

_ Él dijo que duermen juntos.

_ Si, dormimos juntos, y nunca en mis ocho años de relación con ella he tenido impulsos sexuales.

_ ¿Y ella para contigo?

_ Tampoco, para eso tiene a Fernando “que la hace vibrar el alma”.

_ Lo voy a matar – Sale corriendo detrás del auto, Darío lo sigue incluso lo pasa para detenerse delante de él, al ver la velocidad de su hermano se ponen posición y el impacto de ambas fuerzas hace que cada uno salga volando en distintas direcciones- _ Retírate o juro que levantare mi mano contra ti.

_ Quiero ver que lo intentes – Y los rasgos lobunos aparece en ambos- _ Debes calmar tu ira hermano -Ambos en posición de ataque-_ Por todos los dioses ¿Vamos a pelear por culpa de Fernando? 

_ - Elián relaja la postura y regresa a la casa, pasa de largo sin saludar, Briseida se disculpa, va detrás de él- _Déjame solo.

_ ¿Va a querer que también vaya a la cacería?

_No, ahora serás tan amable de salir de aquí. 

_Solo por esta noche, mañana vamos a hablar. -por primera vez en siglos ve que los ojos de su padre cambian involuntariamente, baja la mirada-

_ Mañana hablamos.

Darío baja al sótano donde Elián golpea sin piedad la pared, al ver a su hermano y recordar las palabras de Fernando le da un golpe en el rostro, el menor se limpia el hilo de sangre que sale por la comisura de sus labios, inhala sin avisar regresa el golpe, el mayor hace una mueca de dolor, cobra la compostura gruñe y se abalanza contra su hermano, Briseida al escuchar los ruidos, los gruñidos no se atreven a bajar decide esperar a que alguno de los dos suba a la sala.

_Entiende que no la amo de esa manera.

_ ¿Por qué duermen juntos?

_ Porque a ella le gusta mi aroma, se siente segura y palabras de ella " se siente normal".

_ ¿Normal? 

_Si, normal, Elián, ella y yo somos amigos, pero tenemos cierta intimidad, tenemos secretos y créeme no la veo como mujer, no la deseo.

_ ¿Seguro?

_ Sabes bien que no puedo casarme con ella, pero créeme de amarla como mujer ya fuera mía.

_¡Es mía! – grita enojado-

_ Lo sé- bajando la guardia- _Hermano, nunca he acudido a su celo, su aroma nunca ha cambiado para mí.

_- Baja la guardia- _ Perdóname por dudar de ti. No sé qué me pasa.

_ Pasa que estas emparejado con ella y ella no sabe de ti y tus sentimientos y sus acciones te lastiman, ambos sabemos que va a tener relaciones con Fernando y ambos sabemos que desearías tener el lugar de Fernando.

_ Fernando, Fernando, Fernando, quiero a ese hombre lejos de ella. – Los hermanos ya relajados planean como sacar a Fernando de la ecuación llamada Secundina- 

_Mi Secu es algo complicada, no cree en el amor o más bien no se cree merecedora de ser amada.

_ ¿Por qué?

_ Por su físico, por su estúpida manera de pensar así que ve de apoco después de todo tienes toda la eternidad.

_Ventajas de ser inmortal, pero ella no es inmortal, tarde o temprano sus ojos cafés se van a cerrar. Y en esta guerra en la que estamos quien sabe contra quién tal vez sean mis ojos los que se cierren 

_Roguemos a los dioses que ninguno de la familia Licaón vaya al hades pues el tártaro nos espera.

_Darío ¿Cómo se enamora a una mujer que no cree en ella? 

_ Con paciencia y derrumbando sus miedos.

_ Dime como, tu tienes experiencia con ella.

_ Pues… ama ir de compras, pero nunca va porque llora al no encontrar ropa bonita de su talla, ama el maquillaje, aunque siempre la vas a ver con la cara lavada pues cree que parece payaso al maquillarse, le digo el rojo le queda bien.

_No es tan gorda ¡digo! ¿Cómo cuanto pesa, cien, ciento veinte? 

_ Más o menos. 

_ La llevare de comprar ¿Le gustan las flores? 

_ Si, pero prefiere verlas en el jardín que en un ramo. 

_ Como mi Elora, amaba sus jardines. ¿Crees que algún día me acepte como su novio? 

_ No, eres guapo y millonario y las cosas buenas a ella nunca le pasan.

_ Que ánimos me das, no soy guapo, soy alto. 

El teléfono de Darío timbra ambos hermanos buscan de donde viene el sonido por causa de la pelea se desconocía el paradero del móvil, para cuando lo encuentran el sonido había finalizado, toma el celular la llamada perdida era de Secundina, regresa la llamada, pero nunca responde.

_ Le hizo algo ese cabrón, por eso te llamo.

_No lo sabemos, tranquilo ¿Sí? Ella siempre me llama para platicar antes de dormir.

_ Voy a buscarla.

_Ya pensaste que le vas a decir cuando te vea. 

_ Paseo nocturno.

_ ¿Justo donde esta ella?

_ Iré a buscarla yo y si es algo malo te llamo para vayas a su rescate y seas su caballero de brillante – lo ve de arriba abajo- _ Pelaje blanco. 

_ Pendejo. 

_ El pendejo es otro que siente celos de Fernando un simple y asqueroso mortal que palidece ante ti.  – Elián se avergüenza por las palabras del menor- _ Por otro lado entiendo tus celos hacia conmigo, joven, guapo, fuerte, inteligente soy un buen partido que nada le pide al rey de los licántropos.

_¡Fuera de mi sótano! Y ve a buscar a tu reina.

_- Hace una exagerada reverencia que hace reír a su hermano- _Si su majestad

     Se llegó la mañana, ella fue directo al sótano donde su padre ya estaba despierto ejercitándose, el no detiene su rutina es ella quien se incorpora a la rutina, él es quien inicia la charla contando todo tanto de los asesinatos, la interrogativa de quienes están cometiendo estos asesinatos, así como el que encontró a su nueva alfa cosa que le da alegría ya que su padre lleva años solitario. En el transcurso de ese día llegaron más miembros de los Licaón los necesarios para acompañar al líder, se organiza la expedición, a la mañana siguiente llegan de diferentes etnias seis de cada una Mayo, Yaqui, Seris, Pimas estos últimos son los que tiene el mayor conocimiento de la Sierra Madre Occidental, siendo un total de treinta hombres, siguiendo las indicaciones  se arman tres grupos de treinta, diez por la ruta de la costa: El Desemboque, Puerto Libertad, Puerto Peñasco, unos por la sierra: Yecora, Arivechi, Tepache, Agua Prieta, y otro por el centro siguiendo la carretera nacional quince, cruzaron la frontera a Estados Unidos en donde ya los estarían esperando, Navajos y Apaches. 

Una noche antes de partir donde ya la luna coqueta que en un par de horas se terminaría de llenarse decide ir a casa de Secundina, no en automóvil, si no caminado, la noche es fresca sin ninguna nube que les impida brillar, los rayos de esa luna hacen efecto en él aunque no cambia si sus sentidos se agudizan, una fina capa de bello cubre su cuerpo, el cabello le crece un poco esa acción le hace liberar un aroma diferente, sigue su camino, el viento sopla suave realmente va disfrutando el paseo, unos ruidos que no son propios de una ciudad le hacen ponerse en alerta sacude los hombros, la cabeza, unos aullidos que no eran de perros ni eran conocidos detiene su andar, carros van y viene, el sigue buscando con la mirada de donde provienen lo aullidos, busca un lugar alto pero no hay, da un pequeño salto para echarse a correr y es ahí cuando otro le da alcance, le golpea con el hombro haciendo que pierda el equilibrio y caiga rodando en repetidas ocasiones por fin puede detenerse sin dar tiempo se pone de pie ante el un hombre desnudo, de apariencia joven le avienta a los pies pedazos de piel con el tatuaje de su clan, Elián ve los tatuajes levanta la mirada se encuentra con unos ojos amarillo brillante el oponente no le habla le gruñe, da tres paso salta para atacarlo en el aire cambia de humano a lobo, Elián aun humano pone las manos delante de él cachando al lobo del cuello y lanzándolo lejos, la luna ya se terminó de llenar, el contrincante en vez de estar en cuatro patas se alza quedando en dos, Elián retrocede no por miedo, más bien por precaución con cada paso queda retira un teni después otro , un segundo ataque del oponente le da en el pecho, otro zarpazo con eso cae la camiseta así como él mismo realmente fue fuerte el golpe, no pierde el conocimiento, le atacan de nuevo esta vez su brazo izquierdo es quien recibe la mordida soltando un grito de dolor, a conciencia cambia su brazo derecho más largo, la mano a garra, golpea en el rostro a su oponente haciéndolo sangrar aprovecha ese par de segundos para quedar desnudo, aun con su brazo mal herido y sangrando casi desprendido se retuerce crece un par de centímetros más, sus ojos se tornar rojos pasan a blancos, con la derecha se arranca la piel del rostro dejando al descubierto su lobo de pelaje negro le gruñe se lanza sobre el atacante dando de lleno en el cuello, con su mismo codo golpea el rostro, retrocede para poder tomarlo mejor de cuello lo sujeta fuerte lo lanza por los aires que para desgracia de él cae en sus patas traseras gruñe y aúlla para volver a atacarlo de frente salta cayendo encima de Elián, le va morder Elian esquiva la mordida, aprovecha que su atacante se golpea el hocico es él quien le quien le muerde el cuello, la sangre empieza a brotar a chorros las fauces de se cierran sobre el cuello hasta que arranca todo el lado izquierdo dándole muerte. Lo suelta, aúlla en repetidas ocasiones, en pocos minutos es rodeado por varios lobos cuadrúpedos, reconoce a uno baja la guardia, avienta el cadáver, unos lobos se lo llevan.