Capítulo 11: ¿Indeferencia sxual?
Ja, ¡qué atrevida!, había muchas mujeres que querían tener acostarse con él en la ciudad N, y había innumerables mujeres que querían ser su amante, pero para él, ella fue la primera mujer en decir que quería ser la Sra. Rouco.
¿De dónde vino su confianza de sí misma?
-Me falta una esposa, pero hay muchas mujeres buenas que quieren ser mi esposa. Parece que no eres elegible para negociar los términos conmigo, y mucho menos hacer un trato conmigo.-
Justo cuando Adán estaba a punto de colgar, Estrella dijo apresuradamente, -Señor Adán publicaste el puesto de la señora Rouco en la empresa, debes estar muy ansioso en casarte, puedo aceptar un matrimonio falso, después de que todo se acabe, definitivamente no te complicaré.-
¿Un matrimonio falso?
Los delgados labios de Adán cosquillearon silenciosamente. Esta mujer fue un poco interesante.
Estrella no consiguió la respuesta de Adán, presionó sus nerviosas emociones y dijo, -Si fuera otra mujer, incluso si ella acepta un matrimonio falso contigo, me temo que te complicará después...-
-¿Tienes tanta confianza que no me complicarás a mí? -
-Claro, Sr. Adán, te digo honestamente que soy frígida en sexo. Además, mi corazón murió hace tres años. -
Tres años antes, su vida de una hija de una familia rica cambió totalmente de una noche. Después de experimentar una pérdida de dignidad, que su padre se suicidó saltando desde un edificio, la traición desvergonzada de Iván y la crueldad de Doria y de su hija, la única cosa que quedaba en su corazón era la venganza.
Adán consideró las palabras de ella, que ella era frígida en sexo, dijo con una voz fría y magnética, -será mejor que seas frígida en sexo.-
-Entonces... ¿Sr. Adán...?-
-Este asunto, después de todo, es muy importante, necesito dos días para pensarlo.-
Estrella suspiró silenciosamente, -Bien, estoy esperando la respuesta de Sr. Adán.-
...
Después de que Adán colgó el teléfono, un brazo pequeño empujó la puerta del estudio para abrirla.
-¡Papá! ¡A quién estas llamando! ¡No me acompañas a dibujar! -
La chiquita entró corriendo al estudio con dos piernas cortas sosteniendo el dibujo que acababa de dibujar. Adán se inclinó y tomó a su hija en sus brazos, y la miró, -Deja a papá que vea tu dibujo.-
Adán miró la pintura de acuarela, que fue pintada por Paulita hace unos días. Antes en el dibujo solo había él y ella, pero ahora apareció una persona más. Frunció el ceño ligeramente, -¿Quién es? -
La chiquita dijo con voz lechosa, -Ella es Estrella. Cuando Estrella nos dio una lección de dibujo hoy, Paula pintó en secreto porque la maestra dijo que tendríamos que dibujar papá, mamá y nosotros mismos, no puedo faltar a mamá. Papá, si cuento a mis compañeros que ella es mi mamá, ¿me van a creer?-
El dedo pequeño de la chiquita señaló a Estrella pintada en su dibujo, levantó su rostro inocente y le preguntó a Adán.
Temiendo que su hija estuviera triste, Adán bajó la cabeza y besó la parte superior de su cabello, dijo, -Claro, te van a creer.-
-Papá, si mamá tarda mucho tiempo en volver desde la planeta Marte, ¿puedes pedirle a Estrella que sea mi mamá?-
Los ojos de Adán se sorprendieron, mirando al pequeño con diversión y murmuró, -Vas a tener que preguntarle a Estrella.-
La chiquita sonrió alegremente y entrecerró sus grandes ojos, -¡Le preguntaré cuando voy a la escuela mañana!-
...
Tan pronto como Estrella regresó a la residencia, Perla la detuvo para hacer preguntas.
-Estrella, ¿cómo estuvo tu entrevista hoy?-
Hablando de la entrevista, Estrella levantó la mano y se palmeó la frente, -No menciones la entrevista, fui a un lugar equivocado e hice una broma.-
Perla vio que ella no estaba de buen humor, además regresó con un retrato de Stefano en la mano, -¿Has regresado a la villa de la familia Berrocal esta tarde?-
Escurrió la toalla del baño y limpió suavemente el retrato polvoriento de Stefano, y respondió: -Bueno, vi a Doria y Iván, y estaban mudando. -
-¿Qué? ¿Viste a esos dos hijos de puta? ¿No te hicieron nada malo?-
Ella se rió débilmente y negó con la cabeza. -No. Yo era tan inocente antes. Fui traicionada mentida por Doria y Irene, y Iván me abandonó. Ya perdí todo lo que podía haber perdido. Ya no tengo nada que temer.-
-¡Esa Doria y Irene son dos hijos de puta! En cuanto a Iván, ¡un cabrón! ¡Otro día te presentaré a mi hermano! ¡Un gran hombre cálido incomparable! ¡No pienses más en ese bastardo Iván!-
Estrella miró a Perla, recordando el trato que tenía con Adán, y se mordió los labios ligeramente. Si Perla supiera que pudiera sacrificarse a ella misma por la villa de su padre, ¿pensaría que era una puta también?
Vale, mejor no le contara por este momento para que Perla no malinterpretara a ella, de todos modos, su trato con Adán no debería durar mucho.
...
Esta noche, durmió extremadamente inquieta.
El aliento caliente del hombre roció su piel como una llama, extremadamente caliente, el hombre y la mujer estaban haciendo el amor en la cama doble.
El hombre erguido y musculoso la apretó debajo de él, sus actos fueron muy salvajes y dominantes.
Pero él era demasiado fuerte, ella no podía soportarlo más,le rogó llorando para que fuera gentil.
-¿Más gentil? ¿Estás segura? ¿Ya no quieres diez millones?-
Lloraba como un gatito, parecía arrojada a un enorme remolino, le dolía todo el cuerpo pero sentió un extraño entumecimiento, tal placer la hacía entrar en pánico.
-No... por favor... por favor... ah-!-
¡Resultó que fue un sueño!
Estrella se despertó de su sueño y se sentó en la cama con sudor.
Ya habían pasado tres años, pero esta pesadilla todavía la perseguía de vez en cuando.
A veces, también tenía la curiosidad por saber quién y qué tipo de persona era el hombre, el padre de la niña.
-Estrella, ¿qué te pasa? ¿Estás teniendo una pesadilla?-
Fuera de su cuarto, sonó la voz preocupada de Perla.
-¡Oh, estoy bien!-
Levantó los ojos y miró el despertador de un lado: eran las siete cuarenta y cinco, casi las ocho.
Se acostó sobre la cama, con los brazos descansando sobre su frente sudorosa, y se calmó un rato antes de levantarse de la cama.
Después de lavarse y desayunar, fue al jardín de infancia de idiomas extranjeros.
A las 8:30 de la mañana, Estrella acababa de llegar al jardín de infancia, Paula con la mochila rosa de Peppa Pig le llamó desde lejos, -¡Estrella!-
Estrella siguió su voz y vio a Paula que vino corriendo hacia ella con una pequeña mochila en la espalda. Cuando se acercó a ella, no pudo detenerse y su rostro cayó sobre su regazo.
-¡Estrella, buenos días!-
Estrella sonrió y frotó el cabello corto desordenado de la chiquita, -Buenos días, Paula.-
La sostuvo a la chiquita en una mano, inconscientemente miró fuera del jardín de infancia, -¿Quién te trajo a la escuela esta mañana?-
-¡Fue papá! -
Se sorprendió un poco, recordó su trato con Adán, y luego miró a Paulita. Si Paulita lo supiera, podría ser su madrastra... ¿ sería infeliz?
Por razón desconocida, la primera vez que vio a Paula y cuando se enteró de la situación de su familia, sintió pena por esta chiquita inexplicablemente.
-Estrella, tengo algo que quiero mostrarte. -
La chiquita tocó a Estrella que estaba aturdida, y mientras la jalaba a sentarse en los escalones con ella, se quitó la pequeña mochila que tenía en la espalda.
Estrella frunció los labios y sonrió y preguntó,-¿Qué me vas a mostrar?-
La chiquita abrió la cremallera de la mochila y sacó un trazo de acuarela de la mochila, -¡Estrella, mira! ¡Te dibujé al lado de mi padre y yo! ¡De esta manera, mi padre y yo no estaremos solos! ¡ Estrella ya no estás sola! -