Librería
Español
Capítulos
Ajuste

3

Louise y yo estábamos en el auto yendo al centro comercial, también descubrí que Louise es hija de un famoso director de cine de California, solo el hecho de que tenga su propio chofer demuestra que debe ser bastante famoso.

Apenas llegamos, nos fuimos a comer, ya que yo no había comido nada en todo el día .

- Chica, ¿cómo puedes pasar sin comer? ¡Yo como cada 5 minutos! - dijo sorprendida y yo reí .

- Yo también como mucho, creo que con tanto pasar estos días termino olvidándome de comer .

Fuimos a Mc'Donalds y comimos mucho, justo después de eso sentí algo que no había sentido en mucho tiempo .

- Louise, ¿te importa si voy al baño muy rápido? - Yo pregunté.

- Iré contigo. - dijo levantándose

- ¡No! Prefiero ir solo. - Dije y solté una risa nerviosa .

Ella asintió y fui al baño, tan pronto como entré a la cabaña puse toda la comida en el inodoro... por mi propia cuenta.

No he pasado por esto en mucho tiempo, así que tan pronto como me di cuenta de que lo había hecho de nuevo, me eché a llorar .

Pasó el tiempo y yo seguía ahí llorando por no poder controlar este maldito sentimiento. Ni siquiera me di cuenta cuando Louise empezó a llamar a la puerta.

- ¿Oye? ¿Estas ahí? - Preguntó

- ¿Por qué lloras? Ven aquí, no puedes llorar sin al menos decirme por qué.

Después de tanto insistir, salí y comencé a contar todo lo que sentía que necesitaba contarle a alguien.

Hace tiempo que sentía que necesitaba decírselo a alguien, en la escuela la gente se burlaba mucho de mí, por eso terminé desarrollando una distorsión de imagen y no me veía tan delgada como dicen que soy, junto con eso vino trastornos alimentarios, no podía comer sin querer vomitar todo después. Pensé que eso había terminado, pero ahora no estoy del todo seguro. - Dije, Louise y yo estábamos sentados en el piso del baño, mientras le decía algunas cosas que sentía que eran necesarias, algo me dice que Louise es una persona confiable .

- ¡Dios mio! Lo siento, no pensé que pasaría por esto, lo siento mucho... - Dijo Louise, y pude ver tristeza en sus ojos.

- Estoy bien, al menos eso creo. - dije y le di una leve sonrisa.

- Quiero que sepas que eres perfecto, tu cuerpo es perfecto y sin duda te convertirás en el centro de atención en la escuela mañana. Eres una persona muy agradable, ¿ya puedo decir que te considero un amigo? - dijo y yo sonreí, hacía tiempo que no me sentía especial .

- Gracias eres muy guay. Dije y puse mi cabeza en su hombro.

- ¿Qué hacen tus padres? - Preguntó

"Mi mamá es doctora y también es dueña de una clínica de dermatología", le dije. - Mi padre tiene un restaurante, trabajan mucho, rara vez tenemos momentos tranquilos con la familia .

- ¿Esto es malo?

- Sí, me gustaría tener un poco más de tiempo con ellos. - dijo desanimado. - Pero ya estamos hablando mucho de mí, hablemos de ti, ¿a qué se dedica tu madre?

- Como dije, mi padre es director de cine, mi madre ya tiene una agencia de modelos, un poco famosa aquí en California, pero es más famosa en Nueva York donde están las oficinas centrales.

- ¡Que bueno! ¿Tú eres modelo? - Yo pregunté

- No, Dios no lo quiera, no hago nada. Las chicas de la escuela cantan, bailan, animan, son súper listas y yo solo sé dormir y comer. - dijo y nos reímos. - ¿Haces algo?

- No. Me gusta leer y escuchar música, de lo contrario no hago nada más. - dije y volví a reír .

[...]

Estuve sentado frente al vestidor durante unos 40 minutos viendo a Louise probarse 6363738 prendas diferentes .

- ¿Podemos ir ahora? - Pregunto haciendo una cara de aburrimiento.

- ¡Sí! - dice saltando de alegría mientras sale del probador con un montón de ropa en la mano .

Fuimos hacia el cajero y la chica mira a Louise con los ojos muy abiertos.

- Dio 3 . pierda. - dice la niña después de terminar de agregar todas las piezas .

De hecho, Louise es bastante rica .

[...]

- Luisa! - digo riendo mientras me pasa el batido por la punta de la nariz .

- Está bien, está bien... - Yo también me río, estamos en el patio de comidas tomando batidos, apuesto a que la gente que nos rodea debe pensar que estamos locos.

- ¿A dónde vamos ahora? - pregunté cuando vi que ya teníamos muchas bolsas pero aún necesitaba comprar algunas cosas.

- Hm... - Hizo una mueca pensativa. - ¿Que necesitas comprar?

- Útiles escolares, ropa adecuada para ir a la escuela y otras cosas aleatorias. - Yo hablé

- Ok, al otro lado del pasillo hay una papelería, vayamos allí primero. - dice y nos ponemos de pie.

Una vez allí, cada uno se fue por su lado, definitivamente necesito mucho porque todo lo que tenía del año pasado se fue.

Primero voy al estante de bolígrafos, tomo algunos bolígrafos, bolígrafos de gel y resaltadores. Luego voy a la sección de post-it y elijo algunos simples en colores aleatorios. A continuación, me dirijo al pasillo de cuadernos y elijo una carpeta de color rosa pastel.

Después de unos minutos caminando por la tienda, me di cuenta que ya conseguí todo lo que necesitaba, ahora viene la parte más difícil... encontrar a la Sra. Louise .

- Finalmente le encontré. - digo entrando al pasillo de gomas.

- ¡Oh hola! ¿Compraste todo lo que querías? - Preguntó.

- Sí, ahora vámonos, está oscureciendo y necesito llegar a casa antes de las 20:00.

- Todavía necesito comprar algunas cosas, puedes ir a las tiendas restantes, nos vemos en el patio de comidas, ¿de acuerdo? - habló

- Está bien, no te demores. - digo y nos saludamos antes de ir hacia el cajero.

Después de ir al cajero, salgo de la tienda con más bolsas y ya siento que me duelen los brazos por el peso.

Camino varios pasillos hasta que me siento demasiado cansada para caminar, me duelen los brazos y me siento débil .

- ¿Necesita ayuda? - una voz masculina habla frente a mí, y levanto la cabeza para poder mirar.

- ¿Scott? - pregunto al reconocer su rostro, el mismo chico que conocí hoy en el skate park.

- ¡Natalia! ¿Estás sola? Déjame ayudarte a llevar estas bolsas. - dijo y abrí una sonrisa, es muy lindo .

- Gracias. - digo cuando veo que me pone las bolsas encima de un banco.

- Bueno, este es Blake. - dice Scott y me giro para mirarlo a la cara.

El chico rubio... Este es el chico Blake del que tanto hablaron, el mismo chico que me dejó sin aliento en mi primer día en la ciudad, sus ojos azules escrutándome me dieron ganas de fingir un desmayo, es increíblemente guapo, su rostro casi perfectamente simétrico, sus cejas, sus ojos, su boca... todo en él es perfecto .

- Hola... - digo avergonzado, y puedo sentir mis mejillas sonrojarse .

- Vamos hombre. -Blake le habla a Scott quien lo mira con desaprobación .

- Lo siento Natalia, me tengo que ir, fue lindo verte de nuevo. - dice antes de irse, dejándome ahí parada como una idiota.

¿Qué tiene de hermosa esa cosa, tan grosera, sería difícil responder a mi hola? ¡No costó!

Descarga la aplicación ahora para recibir recompensas
Escanea el código QR para descargar la aplicación Hinovel.