2. El Encuentro y el Dragón

Después de dedicarnos a casi 2 horas en llegar a la discoteca "Dragón", nos bajamos del auto y entramos, todo era hermoso, grande y sobre todo muy bullicioso, música de todo tipo, escuchando y bailando al son de la música electrónica, nos adentramos hasta la barra

Liseika pidió una botella de Tequilla, mientras yo me fui por un rico y delicioso vaso de agua, Jajajja no me gusta beber soy malísima para eso, pero ella me regaño y al final, pedí una copa de Bailey, es un trago rico, dulce y delicioso.

mientras tomábamos contenta, se acercaban a nosotras Esteban y su amigo Ernesto, ella estaba súper emocionada por Esteban, mientras que yo solo disfrutaba de esas copas, al final bebí como 5 copa de ese rico licor, bailamos mucho, después Liseika me dice que irá con Esteban arriba, ya saben para tener sexo desenfrenado, esta discoteca tenía tres pisos.

1. Era el de baile principal.

2. El de VIP.

3. y por último el de las salas especiales y de descanso.

Ernesto, me pidió que fuéramos, a lo claro me le negué, no me interesaba en nada, no es mal chico y es guapo, alto, cuerpo bien desarrollado, ojos marrones y cabello amarillo, solo que no es mi tipo... discutimos un poco, me jalo de forma grotesca, así que le di una buena cachetada y me soltó, creo yo que debe ser que estaba borracho, en fin...

Al final se enojó un poco, pero no me importo, yo salí para ir al baño, porqué la verdad ya estaba un poco ebria, creo no un poco sino muy ebria, pero aún podía caminar, a medio tropezón llegue al baño, pero antes de llegar, me choque con una espalda ancha y gruesa pero muy formada, con la mirada en el piso, pedí disculpas, el chico se giró y cuándo levanté la mirada, sentí como si el mundo se detuviera al punto que no escuchaba la música, era un hombre encantador, sus ojos color azul como el océano hermosos y profundos, con una mirada fuerte y tan varonil, llevaba una camisa en V que se le adaptaba muy bien a su cuerpo grande y exquisito, si les digo que creo que me moje, si pues me moje con solo ver esos ojos azules, pero al seguir mirándolo pude ver que se agarraba la parte baja del estómago y distinguía sangre, goteando.

Me puse algo nerviosa, pero no sé por qué decidí ayudarlo, le pregunté si estaba bien, pero no me dijo nada, lo miré algo feo por no responderme, en eso me doy vuelta para irme y me agarra del brazo para meterme al baño de hombres, no les miento me dio miedo, iba a gritar pero me tapo la boca con la mano, me miró y me dijo al odio con esa voz gruesa y a la vez demandante,

¡No Grites! yo solo asentí, mientras me soltaba podía sentir su fragante aroma, Dios que hombre más sensual, mire delicadamente su herida y me asustó así que me di vuelta, rompí mi vestido y lo presione, me miraba detallando lo que hacía, podía sentir como esos ojos me quemaban.

le dije suavemente sin hacer ruido..., !Solo te ayudo, tranquilo no haré nada malo!

después de un rato se dio vuelta y en el baño abrió una puerta como en las películas de acción y espionajes, me agarro de la muñeca y me jalo con él, pasamos un pasadizo y nos adentramos a una habitación, bien tipo millonarios gigoló.

al cerrar la puerta, me dijo que apenas llamará a su gente, me podría ir, solo asentía un poco confundida y claro borracha.

lo raro es que no sé cómo, saque mis 5 sentidos y logre estar de pie y al pendiente de cualquiera movimiento raro, el caminaba y llamo a alguien, colocando el celular en la mesita.

pib, pib, pib,

-Jefe, dónde está?

Malditos inútiles, para qué demonios les pagó, quiero que ese tipo en mi oficina en 10 minutos, ni un minutos más, sino eres hombre muerto Darío.

-Lo siento Señor Magnum, enseguida se lo traigo.

Después que el terminará esa llamada, sentí un escalofrío muy extraño, solo quería salir corriendo de ahí, pero no podía dejar de verlo y preocuparme por su herida.

Después de un rato en silencio y para romper el hielo, le pregunté si tenía algún botiquín, solo me miró y me dijo que revisará en el cajón del gran mueble de roble, al abrirlo lo encontré.

Me acerco a él y le dijo que se quite el suéter, en ese preciso momento sonó un relámpago y me asuste tanto que me aferre a él, colocando mi cabeza en su pecho.

Me miró, me toco el hombro y me dijo cerdita suéltame y cúrame, quede algo en shock y muy molesta le respondí, No soy ninguna cerdita, me llamo Isabel, así que cuida tú maldita boca conmigo... (Si soy algo malhumorada si son groseros conmigo).

El solo me vio con esos ojos azules hermoso, se echó a reír y era como escuchar a pajaritos, era la risa más hermosa, pero después me dice, vaya, vaya esta cerdita sí que tiene agallas, ahora cerdita, ayúdame a curarme para que te largues de aquí pronto.

y si no quiero, que me vas hacer? haber señor matón,

Jajajja de verdad que tienes agallas, bien, bien… Isabel ahora ayúdame que tengo trabajo que hacer... Bueno está bien ahora quita la mano y déjame ver!

Bien, no es muy profundo, así que vivirás, le limpié y le coloqué un par de vendas, el solo me miraba, me sentía nerviosa pero bueno, trataba de disimular lo mejor posible para que él no se diera cuenta.

En eso él se levanta de la cama y se da vuelta y ahí está, ese magnífico Dragón en su espalda, como la mejor presentación de dureza y majestuosidad.

Quedé impactada por el detalle y por curiosidad le pregunté , porqué te colocas una ubicación en tu espalda si, nunca la vas a ver, él se quedó estático y me miró con asombro para decirme con rudeza, ¿Quién coño eres tú y quién te mando?

quedé algo fuera de base porqué me miraba como si me fuera asesinar en cualquier momento, estaba furioso, me tiró a la cama y me seguía repitiendo quién era, solo le dije soy Isabel Donovan, estudiante universitaria, al estar el encima mío, sentí su fuerte cuerpo presionándome, me mordí sin intención el labio inferior de forma sexi, el me miró y me dijo que cómo descubrí que eso sería una ubicación, le dije que era Arqueóloga y era normal leer a través de las cosas.

sentí que se había calmado un poco, se paró y llamo a su asistente, creo que era el mismo con el qué hablo primero.

-Si jefe.

-Darío, ya lo encontraste?

-Sí señor, ya estamos por llegar en 5 minutos.

-Perfecto, aquí te esperó.

Ahora bien, cerdita que voy hacer contigo.

No soy cerdita, me llamo Isabel, y si no te importa me puedo ir por dónde entre.

veo que tienes muchas agallas para contestarme, te dejaré una vez llegue Darío, le pediré que te saque y te lleve a tú casa sana y salva.

Pero te advierto, si me enteró que hablas algo de lo que has visto aquí, y sobre todo de mí tatuaje, te mato.

Me sentí, temerosa pero trate de estar lo más tranquila, pero por dentro me estaba muriendo del miedo, o quizá no? pero tenía tanta duda de saber dónde me llevaría esa ubicación.

y para la mala suerte de él jajajajajaj tengo memoria fotográfica, así que será difícil olvidarse de eso, con mis pensamientos y sentada en silencio, me decía a mí misma que apenas llegará lo iba a dibujar y lo tendría que averiguar.