Lo De Anoche
Me renuevo en la cama, abro los ojos lentamente observando la pared de la habitación.
Me siento rápidamente tallando mis ojos, observó la cama a mi lado y la veo vacía.
Empiezo a recordar lo sucedido en la madrugada y rápidamente me empiezo a maldecir.
"Es tu jefe idiota"
Me levanto tomando del suelo mi ropa, reviso toda la habitación y no hay rastros de él.
—¿Cómo se me ocurrió acostarme con él?
Obviamente que solo fue sexo y esto complicará todo.
Camino directo al baño vistiendome y lavando mi rostro para que nadie me vea desastrosa.
Salgo de la habitación con los zapatos y mi bolso en mis manos y voy directo al elevador.
Al abrir sus puertas me detengo abruptamente al ver a Helen la cuál lleva un café en su mano y me mira asombrada.
—Tiara, te estuve llamando toda la mañana e incluso fui a buscarte a tu habitación pero es evidente que no dormiste en ella.
Me subo al elevador, marco nuestro piso y me sigue mirando.
—Ya se lo que te preguntarás, pero te respondo en mi habitación, aquí no.
Guarda silencio, al abrir sus puertas caminó rápidamente a mi habitación seguida por ella.
Saco de mi bolso la tarjeta introduciéndola en la ranura de la puerta abriendo la puerta y entrando con ella.
Tiro mis zapatos al suelo, al igual que el bolso y me tiro en la cama.
—¿Qué sucedió Tiara?
—Me acoste con él señor Ivanóv anoche, creo que el pasarnos de copas fue el mayor error.
—¿Qué te dijo?
—Nada, tampoco estaba en la habitación cuando desperté.
—No lo vi abajo tampoco —Musita pensativa —. Vaya, ¿Vez que un jefe si se puede fijar en alguien como nosotros?
—Te equivocas —Me levanto mirándola fijamente —. Esto solo fue algo de una noche.
—¿No hablarás con él de esto?
—No, haré como si nada paso —Suspiró —. Ahora solo necesito quitarme la cruda y alistarme para la presentación de esta tarde.
—Solo quedan dos horas para ella, date una ducha mientras voy abajo por jugo de naranja y analgésicos.
—Gracias Helen.
Me tira un beso, camina a la salida y me levanto yendo al cuarto de baño.
***
Al salir busco que colocarme, tomo una camisa de mangas largas blanca, pantalón de tela negro y zapatos de punta del mismo color. Helen aparece entregándome el jugo y la pastilla.
Me ayuda a secar mi cabello y plancharlo para luego hacerle algunas ondas en las puntas. Ya maquillada tomo mi laptop y la carpeta con todo lo de la campaña.
Salimos de la habitación y se detiene .
Debo ir por algunas cosas a mi habitación, espérame en el lobby.
—De acuerdo.
Subo al elevador, marco el último piso, al llegar voy al restaurante por un café cargado y regreso al lobby tomo asiento en una de las mini sala de espera.
Suspiro tomó un sorbo y levanto la mirada al ver una silueta de un hombre frente a mi.
—Buen día.
—Buen día señor Ivanóv —Digo lo más sería y calmada.
—¿Volvemos a lo de señor? —Musita tomando asiento frente a mi —. Pensé que eso había terminado.
—¿No veo porque?, yo soy una empleada más de su empresa y como tal debo dirigirme a usted con respeto.
—Tiara, lo de anoche...
—Lo de anoche no significo nada señor Ivanóv —Lo interrumpo levantándome —. Eso no debió haber pasado, pido disculpas por ello y le pido no lo vuelva hablar.
Tomo mis cosas y camino alejándome lo más que pueda de él.
—¿Tiara? —Me detengo al escuchar la voz de Ivan —. ¿Vas al salón de eventos?
—Hola Ivan, si.
—Entonces vamos juntos —Me extiende su brazo —. Será un gusto llegar acompañado de una mujer tan bella como tú.
Camino con el llegando al salón, en el ya se encuentra su padre y los demás clientes de la cena de la noche anterior.
Saludos a todos , veo que ya todo se encuentra preparado.
Observo entrar a Helen acompañada del señor Ivanóv, se acerca a sus clientes y saluda uno por uno hasta llegar a Ivan.
Su mirada va a mi y rápidamente la esquivo, toman asiento y yo me alisto para presentar la campaña .
Dejo mis nervios a un lado, le entrego a cada uno una carpeta con la propuesta detallada a media les voy explicando y enseñado lo ya realizado.
Al terminar todos aplauden y se levantan con una sonrisa.
—Es mucho mejor de lo que esperábamos, gracias Alexander.
—Las gracias se la debe a la señorita Landuchi la cuál presento y trabajo en ella.
—Viendo ya lo que queríamos, puedo decir que estamos satisfechos con esto —Le extiende su mano —. La próxima semana nos tendrías en tu empresa cerrando este negocio y proponiéndote otros nuevos.
—Una excusa más para poder verte —Me musita Ivan alejándonos de la conversación —. Acompañaré a mi padre encantado.
—Ivan, es cierto que trabaje en esta propuesta pero yo solo soy asistente de la encargada de publicidad. Si estoy aquí es porque ella no se pudo presentar y me confió hacer esto.
—Pues me alegra que haya sido así —Toma mi mano y deja un beso en ella —. Porque pude conocerte y quedar encantando contigo.
Sus palabras hacen que me sonroje y sonríe coquetamente.
—Toma —Me entrega una tarjeta —. Me gustaría que nos mantuviéramos en contacto y así invitarte a cenar un día de estos.
—Por supuesto, gracias.
—Señorita Landuchi —El señor Ivanóv llega interrumpiéndonos —. Esto es todo por hoy, iremos a comer algo ¿Gusta a ir con nosotros?
—Si, señor —Miro a Ivan y le sonrió —. Fue un placer verte Ivan, estamos en contacto.
Deja un beso en mi mejilla, le sonrió y camino saliendo del salón alado de Helen que me sonríe.
Al salir del salon y llegar al lobby me detengo.
—Lo lamentó señor pero no podré acompañarlos a comer —Me mira curioso —. No me siento dispuesta, que tengan buen provecho.
—¿Quieres que te traiga algo? —Pregunta Helen.
—No hace falta, iré a guardar algunos documentos y revisar otros.
Camino al elevador dejándolos allí parados, subo a el y marco nuestro piso.
Al entrar a la habitación tiro todo sobre mi cama y me tiro a un lado.
Maldita sea la hora en que me acoste con él...