Capitulo 4

¡Por dios, los abdominales de este hombre fueron esculpidos por una deidad! ¡Concéntrate Ava! -Le gritó su mente-

- Señorita Smith ¿Le gusta lo que ve?

- ¡Eeeeh! -Comenzó a transpirar y tartamudear- Disculpe, no… no… noto que le dieron mi recado, señor

- ¿Tiene el pensum? -Ava se giró, con las manos temblorosas y buscó su maletín, Jenna la miro y le acerco lo que buscaba, aguantando la risa-

- Aquí está, por favor detállelo y si no está de acuerdo con algo indíqueme y de inmediato hare los cambios pertinentes -Dijo Ava aun mirando el pecho desnudo de Lucas-

- Bien, por favor descanse, a las 7:00 en punto se servirá la cena ahí conversaremos sobre su pensum y de una vez comenzará a encargarse de mi hija, no solo le va a enseñar también será su niñera ¿Le parece bien?

- Si, no tengo ningún problema con eso, ansío mucho conocer a Kelsey -Le brindo una leve sonrisa-

- Perfecto, baje puntual, detesto a los que llegan tarde, con permiso

Ava puso su mano en el pecho, Jenny se apresuró a cerrar la puerta y de inmediato soltó una leve carcajada, Ava la miró seria

- Disculpe señorita, pero es que su cara

- Lo sé, estoy tan avergonzada, además como se presenta así casi medio desnudo, podría provocarle un infarto a cualquiera

- Si, está guapo ¿no? Aun para su edad

- Si ¿Cuántos tiene? ¿50?

- Tiene 45 pero pareciera que tuviera el secreto de la juventud, tal vez es todo el sexo que tiene con esas modelos jóvenes

- Definitivamente, ¿Solo le gustan las jóvenes, cierto?

- No lo sé, mi hermana y yo llevamos menos de un año trabajando aquí, pero antes de que llegara la niña Kelsey vimos a varias y si eran mucho más jóvenes que él, pero la mayoría son modelos y actrices que suelen estar metidas en quirófanos para verse más joven así que uno nunca sabe qué edad tienen realmente

- ¿Sabes algo de la madre de la pequeña?

- No y le recomiendo que no pregunte, ese es un tema prohibido aquí, si el señor Clark escucha a alguien preguntarle a Kelsey por su madre es despedido de inmediato

- No me digas… -Así que el secreto mejor guardado de Clark es la madre de su hija, interesante, pensó Ava- Gracias Jenna, Penny yo puedo terminar sola, voy a descansar un rato

Ava miró su celular y pensó en escribirle a Jake y pedirle que indagará sobre la hija de Clark, pero seguramente este habrá ocultado cualquier información y conociéndolo ya tendría a varios escuchando sus llamadas telefónicas. Se recostó en la enorme cama y pensó en el plan que debía organizar bien como buscar la información que necesitaba

- Pero con miss terrorífica al acecho estará difícil pero no imposible, aunque solo tengo dos meses -bostezo y cerró sus ojos para tomar una siesta.

Mientras dormía, Ava sintió que alguien le acariciaba su mejilla y su cabello, todo estaba borroso, parecía una figura masculina

- Lucas… -Sintió un beso en la comisura de sus labios, haciéndola desear más… abrió los ojos y se levantó de inmediato, puso su rostro entre sus manos- fue solo un sueño -vio a su alrededor y notó que ya oscurecía, bajo de la cama rápidamente y se preparó para la cena, pues solo le quedaban menos de veinte minutos

(…)

Bajo las escaleras, se sentía fuera de lugar, no sabía a donde ir, el lugar era enorme y no quería que la vieran “merodeando”

- ¿Le muestro el comedor señorita Smith? -Ava pegó medio brinco-

- ¡Señora Martha, no debería llegar de sorpresa, me asustó! -La mujer la miro con la ceja enarcada-

- Mi madre decía que los que se asustan con facilidad, suelen esconder muchos secretos -Ava sonrió-

- Ese no es mi caso, debe entender que no conozco el lugar, usted me dijo que no merodeara, que estaba prohibido si me equivocaba de sitio no quería ser juzgada y con su voz…

-¡Que insolencia! -Dijo Martha enojada-

- ¡No, no, no, discúlpeme por favor! Entiéndame, solo estoy nerviosa y a veces utilizo la comedia para no demostrar mis nervios

-¿Y parece que le funciona señorita Smith?

- A veces no, por favor discúlpeme, no busco faltarle el respeto de verdad -La mirada de la mujer se suavizo un poco-

- El comedor queda al final de ese pasillo -Ava le sonrió agradecida-

Entró al comedor, estaba sola y comenzó a detallar todo, habían unas puertas francesas que daban el acceso hacia el jardín y la piscina, estaban entre abiertas y Ava decidió salir y tomar un poco de aire, se sorprendió, desde la piscina infinita se podía observar el sol prácticamente oculto, una hermosa vista pensó, giro su mirada y vio una pequeña casa con grandes ventanales, un sonido de agua cayendo llamó su atención y decidió acercarse para ver de dónde provenía cuando llegó al sitio sus ojos casi se salen de sus orbitas, era su jefe desnudo dándose una ducha, Ava observo de arriba abajo todo el cuerpo perfectamente esculpido de su jefe, su entrepierna comenzó a sentirse húmeda, una parte de ella le gritaba que dejara de verlo pero la otra solo deseaba estar dentro de esa ducha con ese hombre.

- ¡Hola! -Se sobresaltó al escuchar una dulce voz, giró y vio a una pequeña con un lindo vestido color rosa, su piel era blanca, tenía los ojos color avellana, pero tenía rasgos de su padre- a mi papi no le gusta que lo espíen

- Tú debes ser Kelsey, soy Abigail tu nueva institutriz y no estaba espiando, estaba tomando aire y observando el sol ocultarse -Le sonrió tratando de convencer a la pequeña si le chismeaba al padre que lo vio desnudo hasta ahí llegaría su plan-

- ¿Quieres ver la casa de la piscina? Mi papi dice que cuando crezca será mi casa

- Por supuesto -Suspiró aliviada y siguió a la pequeña intentando sacar de su mente la imagen de su jefe desnudo- Cuéntame de ti Kelsey, ¿Qué te gusta hacer?

- ¡Uhm! Me gusta tocar el violín y jugar con muñecas -Ava sonrió la pequeña era muy tierna- y te digo de una vez no me gustan las matemáticas

- Bueno te gustaran como yo las enseño, será divertido

- ¿Te gusta mi papá? -La sonrisa de Ava se borró por completo-

- ¡No, no, Kelsey! yo solo vine para ser tu maestra

- ¡Uhm…! No entiendo porque nadie quiere a mi papi, es un poco gruñón, pero por dentro es como mi oso de felpa

- ¿Cómo es eso Kelsey?

- Muy blando -Ambas rieron-

- Dudo mucho que tu papá sea blando, a lo mejor lo es contigo porque eres su hija y eres pequeña

- ¿Hablaban de mí? -Ava de inmediato se puso de pie, definitivamente en esta casa están decididos a provocarme un infarto, pensó-

- Si, le preguntaba a Abigail si tú le gustabas, porque te estaba viendo cuando te duchabas detrás de la piscina –

¡Oh por dios! ¡Oh por dios! que este precioso piso de mármol blanco se abra de inmediato me trague y me escupa en japón, las mejillas de Ava nuevamente ardieron, supo de inmediato que toda su cara estaba del color de un tomate ¿Por qué tengo que pasar por esto? Ahora pensara que soy una pervertida, una fisgona, una acosadora

- ¡Es… Es… ¡Eso no es exactamente así señor! salí a tomar un poco de aire, mientras ustedes llegaban, escuché el agua y pensé que… había una llave abierta, sabe el agua derramándose yo… pienso en el medio ambiente, debemos cuidar el agua, y yo… ya no sé qué estoy diciendo

- Espero que haya disfrutado de la vista, digo el atardecer -Dijo Lucas con un tono pícaro y Ava lo miró sorprendida-

- Si, si, hermosa, perfecta, exquisita -Mejor deja de hablar ya, le gritó su conciencia- ¿Tuvo oportunidad de ver el pensum?

- Si, aunque hay algunas cosas que deje fuera, en el internado ya se lo habían ensenado a Kels, no vale la pena explicárselo de nuevo

- ¡Perfecto, perfecto!

- Pasemos al comedor, la comida está servida -Ava asintió mirando al piso, la cena estuvo tranquila, Ava consideró enfocarse en la comida que estaba deliciosa, ya había dicho mucho hace un momento, de vez en cuando miraba de reojo a Lucas, pero cuando lo hacía comenzaba a transpirar-

- Abigail ¿tienes novio? -La pregunta hizo que Ava escupiera el sorbo de vino que había tomado-

- No, Kelsey, no tengo

- Kelsey ¿Qué dijimos sobre hacer preguntas personales cariño? -La mirada de la niña se entristeció-

- Lo siento, papi, solo quería saber

- No… hay problema, no me molesta -Total ya te lanzo por el barranco sin frenos, pensó-

El día no pudo ser tan vergonzoso, vaya comienzo Ava, ahora tu jefe va a pensar que eres como una de esas mujeres que bota la baba por él, bueno no estaría del todo equivocado, algo le pasaba con él, evidentemente se sentía atraída esa personalidad misteriosa y esa mirada intensa, Ava estaba confundida, en el pasado nunca le habría llamado la atención un hombre así pero Lucas Clark era diferente, recordó lo que la pequeña le dijo “es un gruñón pero en el fondo es como mi oso de felpa” “Blando” ¿Será posible? No, no, no puedo ilusionarme con él, mi trabajo es investigar sobre sus secretos.

- Señorita Smith, el señor Clark la espera en su despacho

- Gracias, voy enseguida -Se dirigió con los nervios de punta al despacho, frente a la puerta toco, esperando el adelante-

- Adelante -Ava suspiró entró- señorita Smith por favor tome asiento, aquí está el pensum, Kelsey los lunes tiene clases de violín, miércoles de tenis y los viernes clases de natación, martes y jueves tiene clase de italiano y Frances usted debe estar presente en todas estas clases, si nota algo extraño en los maestros no dude en hacérmelo saber

- Comprendido

- Su contrato y el contrato de confidencialidad, léalo a detalle si hay algo que no le parece, podemos conversarlo -Ava tomo el contrato y observo su pago, tuvo que colocar más cerca las hojas y acomodar los lentes para leer bien-

- ¿Está seguro que este es mi salario? -Dijo con un tono sorprendida-

- ¿Le parece muy poco?

- No, al contrario, es muy generoso -La miró confundido-

- Pensé que estaba acostumbrada a este tipo de sueldos

- Si, sí, pero este ha sido el más alto y algunos… es mejor ni siquiera comentarlos -Pensó en su sueldo en el periódico lo que Lucas le ofrecía por un mes era todo el salario de un año con bonificación navideña, por un momento estuvo tentada a dejar toda su carrera a un lado, firmó el contrato con duda, cayó en cuenta en que se estaba convirtiendo en una estafadora, estaba firmando bajo el nombre de Abigail Smith, en ese momento sintió nauseas-

- Bienvenida a mi hogar señorita Smith, dejó en sus manos mi tesoro más preciado

Esas palabras fueron como una bofetada para Ava, pensó que era la peor persona del mundo, tal vez Lucas protegía su privacidad para salvar a su hija de cualquier rumor o daño que pudieran causarle con respecto a su madre, es lo que lo hace un buen papa y la gente debería respetar eso y ¿Quién era ella para dejar eso al descubierto?

Por otro lado, estaban sus sueños, sus metas, ir a New York trabajar en lo que siempre quiso, se debatía entre hacer lo moralmente correcto o ser egoísta y pensar en lograr sus objetivos y demostrarles a sus padres que estaban equivocados que ella podía tener éxito como periodista.