Capítulo 4

Ester POV

Entro en la misma habitación oscura y sin ventilación, la profesora busca algo en el armario.

-Los dividiré en grupos de tres, tendrán una semana para recrear mi poción de la verdad – Escucho murmullos asustados cuando la maestra habla, reprimo una sonrisa, finalmente un desafío que vale la pena en esta escuela. - Al grupo que entregue en menor tiempo se le entregará una muestra de Félix Felicis. - Termina de decir monótonamente la profesora. El premio no me interesa, sé hacer la poción de la suerte desde tercer año, lo que me interesa es ganar.

Levanto la mano, Snape me mira sin interés.

-¿Existe un plazo mínimo de entrega? - Pregunto.

-Qué presuntuosa de su parte, señorita bruja – Snape se gira para recoger algo de la mesa, cuatro blocs de papel – No hay un plazo mínimo, pero tenga cuidado, conozco bien mi poción. - Le doy una pequeña sonrisa antes de responder.

-Yo también. - Mi sonrisa desaparece cuando la profesora me entrega el cuaderno con los nombres de los integrantes de mi grupo, Blaise Zabini y JeffGustavo.

Respiro hondo antes de dirigirme al fondo del salón donde están los dos chicos, junto con el mismo grupo que siempre está con ellos.

-Parece que estamos juntos. - Hablo de mal humor. Miro a los demás en el grupo hasta que se alejan deGustavo y Blaise. - Las bases de Snape siempre son simples, pero le gusta cambiar cosas específicas, lo que hace que todo sea más interesante.

-¿Estudias pociones? - Miro aGustavo cuando pregunta, con los ojos ligeramente abiertos por la sorpresa, algo en su expresión me conmueve.

-¿Fascinado,Gustavo? - Bromeo con humor.

-Sólo sorprendido. - Su expresión se vuelve a cerrar.

-Tal vez deberíamos buscar algo sobre esta poción en la biblioteca. - Blaise habla por primera vez.

-Allí no habrá nada. Snape no es de los que alardean, se queda con el tesoro solo para él – miro al profesor – Y estoy seguro de que solo propuso el desafío porque cree que nadie lo logrará, pero se equivoca. - Miro hacia atrás - Encuéntrame dentro de dos horas frente a la sesión de Herbología. - Antes de salir noto los ojos deGustavo puestos en mí, y me deja con una sensación extraña.

...

Jeff POV

Maldita sea, esa chica se metió conmigo.

Maldita sea, ella realmente se metió conmigo.

Le di una paliza al Gryffindor que le hizo eso e incluso ahora estoy pensando en ir a los putos comunes de Gryffindor y matar a ese hijo de puta.

Algo en mí se activó al verla llorar, un enojo enorme y primitivo, nunca me había sentido así. No soy un hijo de puta, le pegaría a cualquiera que le hiciera algo a una chica, pero con ella era diferente, sentía que necesitaba protegerla con todo lo que tenía, y eso fue lo que hice.

Con calma sostengo el cigarrillo en mi boca mientras camino junto a Blaise hacia la sesión de Herbología. Escucho risitas agudas que vienen desde lejos, ya había notado a las tres chicas mirándome, pero hoy no tengo paciencia para eso.

-¿Alguna vez has invitado a alguien al baile? - Dejo escapar una risa amarga cuando Blaise pregunta.

Sólo voy a este maldito baile porque mis padres me obligan a hacerlo todos los años.

-No. - Doy una larga calada - ¿Vas a llamar a alguien?

-Tengo a alguien en mente. - Blaise dice nada, sigo su mirada y veo a bruja, su largo cabello oscuro está suelto, escribe concentrada en el cuaderno, sin siquiera notar nuestra presencia.

bruja vuelve la cabeza hacia nosotros.

-Tenemos algunas combinaciones para probar- Le dice a nadie en particular, entrecerrando los ojos ante el bloc que ahora está lleno de notas.

-¿Hiciste todo esto en dos horas? - pregunta Blaise, evito poner los ojos en blanco cuando noto el tono de admiración en su voz.

-No, lo hice en treinta minutos - Garabatea algo más - El resto del tiempo me quedé con mi hermana. - Cristina vuelve a mirarnos - ¿Nos vamos? Tenemos mucho que hacer.

...

Maldita sea, la chica es tan jodidamente mandona.

Blaise es como un idiota con ella y eso realmente me irrita.

Pero tengo que admitir que Cristina bruja es muy inteligente, sabe tanto sobre pociones que incluso me pone un poco inseguro sobre mis propios conocimientos, nunca se lo dejaré saber.

Y en menos de cuatro horas ya tenemos el resultado.

-Quién hubiera pensado que íbamos a ser tan rápidos – murmura Blaise mirándola.

Resoplé con impaciencia.

-Dije – Sonríe mientras mira el pequeño frasco de poción de la verdad. - Ustedes fueron sorprendentemente útiles.

-Y obviamente fuiste mandona – refunfuño en voz alta – Me alegro que la pesadilla haya terminado.

-¿Qué pasa,Gustavo? ¿No te gusta cuando una chica te da órdenes? - La miro fijamente sin reaccionar, escucho la risa contenida de Blaise.

bruja salta de su silla, agarra la petaca y el cuaderno.

-Entreguemos esto pronto.